El TSJC obliga a la Generalitat a reasignar emisoras "indebidamente reservadas"

Com Ràdio recurrirá ante el Supremo

BARCELONA, 5 Abr. (EUROPA PRESS) -

La sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha obligado a la Generalitat a asignar nuevamente emisoras públicas "indebidamente reservadas y sus frecuencias", anulando así el acuerdo del Govern de 2006, en el que se reservaron 22 frecuencias para emisoras destinadas al servicio público local, algunas de ellas para el Consorci de Comunicació Local (Com Ràdio).

Según la sentencia a la que ha tenido acceso Europa Press, dada la falta de justificación material de la reserva de frecuencias para la radiodifusión pública, el Govern debe anular la resolución y asignar nuevamente las emisoras indebidamente reservadas, junto a sus frecuencias.

La Associació Catalana de Ràdio (ACR) interpuso un contencioso-administrativo contra la adjudicación de frecuencias del Govern, recurso que ahora ha sido estimado por el TSJC y que anula dicha resolución.

Según el juez, la resolución es nula por "vulnerar y limitar los derechos de los operadores privados de radiodifusión a la libertad de expresión e información y al pluralismo informativo", además de constituir una medida gravemente restrictiva de los derechos fundamentales a la libertad de empresa.

Otros argumentos esgrimidos por el TSJC para anular el acuerdo es que no se justifica de ningún modo que la necesidad de radiodifusión pública tenga que satisfacerse "a costa de la porción del espacio radioeléctrico destinado a las emisoras particulares", lo que mengua la ya minoritaria posición de las emisoras privadas.

En un comunicado, Com Ràdio ha anunciado este martes que recurrirá ante el Tribunal Supremo (TS) la sentencia del TSJC que cuestiona algunas de las últimas adjudicaciones de frecuencias radiofónicas de la Generalitat.

El director general de la emisora, Francesc Triola, ha considerado que errores administrativos y de procedimiento, que en ningún caso son responsabilidad de Com Ràdio, no se pueden convertir en un instrumento para limitar el desarrollo del proyecto de radio pública al servicio de la ciudadanía de Catalunya.

Para Triola, no es ninguna sorpresa que la patronal de las radios privadas use "todas las estrategias posibles" para impedir el fortalecimiento de las emisoras públicas, que no están condicionadas por la obtención de beneficios económicos a cualquier precio, ha criticado.

Precisamente, Triola ha vinculado el recurso que presentó de la patronal de radios privadas con el reciente informe en el que pide el cierre de Com Ràdio.

Por ello, la emisora ha pedido a las radios privadas que no deben plantear el debate sobre cómo financiar y regular los medios públicos con "maniobras de acoso" en todos los frentes, incluido el judicial, con el fin de buscar el interés económico privado.

"Las pretensiones de la patronal sólo han conseguido una ola de apoyo a la radio pública, y de manera especial a Com Ràdio, a la que se han sumado la práctica totalidad de los partidos políticos, profesionales de los medios y sociedad civil", ha asegurado.