LOS ANGELES 5 Abr. (EUROPA PRESS) -
Si por algo siempre ha destacado el carácter Kristen Stewart es por haber renegado, desde que se diera a conocer, ser una chica cursi, ni presumida ni por estar obsesionada con su físico ni sus estilismos, ¿será ese su mayor secreto de belleza?
Da igual el tipo de peinado que le hiciera a Kristen, porque a las dos horas iba a estar totalmente deshecho. Le da exactamente igual llevar un aparatoso peinado o no, que si le molesta ella se aparta el pelo con su propias manos y se lo amolda a su antojo. En sus apariciones ni tan siquiera lleva la raya del pelo marcada y ese es con diferencia uno de los grandes filones de su encanto.
Además siempre opta por llevar un maquillaje muy discreto porque no es la primera vez que con total soltura se rasca los ojos o se toca la cara, y prefiere apostar por llevar un look muy sutil a prueba de de bombas para que no le juegue malas pasadas.
El color verde grisáceo de sus ojos siempre luce muy limpio, y no abusa de las sombras ni de del pefilador de ojos. La sutilididad es su mejor truco de belleza. Está claro que esta actriz es sinónimo de soltura, naturalidad y discreción y son sus mejores armas de seducción con las que ha conquistado a su novio Robert Pattinson.