MADRID, 10 Dic. (CHANCE) -
Parece que no todo es de color rosa en la relación de Kim Kardashian y Kanye West. Y es que si el periodo navideño supone un quebradero de cabeza para la mayoría de las parejas, para el rapero y la admiradora de Liz Taylor no iba a ser diferente.
Mientras que West esperaba disfrutar de una Navidad tranquila en su casa de Nueva York con su prometida y la pequeña North, para Kim la Navidad no es igual sin pasarla en Los Angeles con su familia.
Según infromaba una fuente cercana a la pareja en la revista Heat, Kim y Kanye llevan "varias semanas discutiendo acaloradamente sobre las vacaciones de Navidad", siendo el principal motivo que Kim asumía que al rapero le parecería bien volar hasta Los Angeles, y en ningún momento consultó con él su plan. "Kanye quiere disfrutar de la primera Navidad de North en la intimidad de su casa neoyorquina, solo con Kim y la niña", aseguró la misma fuente.
Pero, ¿que tiene Kanye West en contra del clan Kardashian? Pues parece ser el estrecho lazo que Kim mantiene con su madre y sus hermanos, con los que protagoniza el programa 'Keeping Up with the Kardashians', no ata a su prometido, quien habría intentando evitar desde el inicio que su nombre se asociara en exceso con el apellido de Kim, convencido de que su vínculo con la famosa familia deteriora el valor de su trabajo.
"Kanye nunca quiso aparecer en el programa porque creía que era muy perjudicial para su imagen, no quiere verse inmerso en un espectáculo televisivo que ha sido criticado por su frivolidad. Desde el principio, Kanye ha tratado de alejar a Kim de los planes de su familia y ahora quiere que su figura se relacione más con él que con el apellido Kardashian. El primer paso para ello es consolidar sus propias tradiciones navideñas como pareja", añadió la misma fuente.