MADRID 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
Científicos británicos han descubierto un "extraño" meteorito en el desierto australiano y de momento desconocen de qué parte del Sistema Solar procede. Estos cuerpos son los únicos supervivientes físicos de la formación del sistema planetario y a través de su análisis los expertos pueden descifrar las condiciones que existieron durante 'la infancia' del Sistema Solar.
El estudio, publicado en 'Science', destaca que sólo se conoce información de cerca de una docena de los 1.100 meteoritos que han caído en estos últimos doscientos años, en referencia a su origen y a cómo se movían por el Sistema Solar antes de caer a la Tierra.
El director del departamento de Ciencias planetarias e Ingeniería del Imperial College de Londres y también responsable del proyecto, Phil Bland, explicó que se encuentran "realmente sorprendidos" con este nuevo descubrimiento, debido a que los meteoritos son las rocas más analizadas en la Tierra y es extraño conocer su procedencia. "Interpretar qué sucedió al comienzo del Sistema Solar sin saber de dónde proceden los meteoritos es como interpretar la geología de algunas rocas caídas en el jardín de tu casa", añadió.
El nuevo meteorito, que tiene un tamaño cercano al de una pelota de cricket, es el primero que se ha recogido con las cámaras instaladas en el desierto australiano de Nullarbor, al oeste del país, en 2006. Los científicos tienen planeado utilizar estas cámaras para encontrar nuevos bólidos y descifrar su procedencia dentro del Sistema Solar siguiendo la pista de la estela que dejan en el cielo.
Tras varios análisis, este cuerpo parece provenir de una órbita inusual o de un emplazamiento cercano al Sol, antes de caer a la Tierra en julio de 2007, según los cálculos de los expertos, que añaden que formaba parte de un asteroide situado en la parte más recóndita del cinturón de asteroides entre Marte y Júpiter. Así, suponen que posteriormente entró en una órbita similar a la terrestre alrededor del Sol.
Igualmente, consideran que es "extraño" por su composición, una roca ígnea procedente del basalto. Tras comprobar ésta y junto con los datos obtenidos acerca de su procedencia, sospechan que cuaja con una reciente teoría relativa a cómo se construyeron bloques de planetas terrestres.