MADRID 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
El año 2013 terminó como el primero de este siglo con reducción de basura espacial. Sin embargo, 2014 no sigue esta línea: en los primeros seis meses del año, los restos han crecido en 250 objetos. En total, son 16.900 los cuerpos espaciales que rondan el planeta, según los datos de la Oficina del Programa de la NASA de Restos Orbitales, al que ha tenido acceso Europa Press.
Por basura espacial se entiende la cantidad de satélites activos o inactivos que han sido lanzados o bien bajados de sus órbitas para ser hundidos en el mar, así como cohetes espaciales antiguos y en funcionamiento, y demás objetos procedentes de la fragmentación de residuos, generados por ejemplo en explosiones.
De manera desglosada, de estos 16.900 cuerpos espaciales que rondan el planeta, la 'Commonwealth of Independent States (CIS) --Reino Unido y sus colonias-- se mantiene como la que mayor cantidad de basura desecha al espacio, con un total de 6.380 objetos; seguida de Estados Unidos con 5.008 y de China con 3.716.
Mientras, la Agencia Espacial Europea (ESA) sigue siendo la entidad que menos objetos emite al espacio, con 93 cuerpos, de los cuales 46 proceden de explosiones y 47 son cohetes, cuerpos y demás escombros.
Además, hay países que independientemente de la agencia espacial a la que pertenezcan, también envían y 'tiran a la órbita terrestre' aparatos espaciales. Así, sería el caso de los 506 franceses, los 213 que tiene Japón, los 175 indios, o los 809 de 'otras' naciones, según se desprende de este informe de la NASA.
El programa de la NASA encargado de controlar la basura espacial es el 'U.S Space Surveillance Network' (SSN). La iniciativa la desarrolla el Gobierno de Estados Unidos y tiene como principal objetivo detectar, controlar, catalogar e identificar estos objetos hechos por el hombre y que orbitan alrededor de la Tierra.
Asimismo, se encarga de predecir cuándo y dónde caerá un objeto de nuevo en la Tierra, cuál es su posición en el espacio, detectar nuevos cuerpos residuales en el espacio y a qué país pertenecen, además de informar a la NASA si estos objetos interfieren con la estación Shuttle.