¿Surgió el Universo de un agujero negro?

El universo surgió de un agujero negro
Foto: INSTITUTO PERIMETER DE FÍSICA TEÓRICA
Actualizado: lunes, 11 agosto 2014 14:50

MADRID, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -

   El Universo podría haber surgido de un agujero negro en un universo de dimensiones superiores, según propone un nuevo estudio realizado por científicos del Instituto Perimeter de Física Teórica, y que ha sido publicado en 'Scientific American'.

   En el trabajo, los expertos señalan que antes del Big Bang pudo haberse producido otro suceso. A su juicio, lo que hasta ahora se ha percibido como el gran cataclismo podría ser el "espejismo" tridimensional de una estrella que colapsa en un universo diferente al actual.

   "El mayor desafío de la Cosmología es entender el propio Big Bang", ha indicado uno de los autores, Niayesh Afshordi. En este sentido, ha explicado que la comprensión convencional sostiene que el Big Bang comenzó con una singularidad: un fenómeno insondable caliente y denso del espacio-tiempo donde las leyes normales de la física se rompen. Sin embargo, ha reconocido que las singularidades de este evento son extrañas y, por ello, su comprensión es limitada.

   A su juicio, la hipótesis del Big Bang es poco probable y sucedió algo más. Según ha apuntado, el Universo actualmente conocido podría ser el "envoltorio" tridimensional alrededor de un agujero negro de cuatro dimensiones. En este escenario, el Universo nació cuando una estrella en un universo de cuatro dimensiones colapsó en un agujero negro.

   En el Universo tridimensional, los agujeros negros tienen horizontes de sucesos --el límite imaginario a partir del cual ningún objeto puede escapar a la atracción-- de dos dimensiones, es decir, que están rodeados por un límite de dos dimensiones que marca el "punto de no retorno." En el caso de un universo de cuatro dimensiones, un agujero negro tendría un horizonte de sucesos en tres dimensiones.

   Los investigadores hacen hincapié en la idea del nacimiento de un agujero negro y defienden que, aunque puede sonar "absurdo", se basa firmemente en las mejores matemáticas modernas que describen el espacio y el tiempo. En concreto, se han utilizado las herramientas de la holografía para "convertir el Big Bang en un espejismo cósmico". En el camino, su modelo parece abordar una larga lista de rompecabezas cosmológicos y - especialmente - producir predicciones comprobables.

   Del mismo modo, han explicado que no hay conocimiento de lo que podría ser similar a un universo de cuatro dimensiones y tampoco cómo sería un universo "padre" de cuatro dimensiones. El trabjo continúa por esta línea.