MADRID, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
Astrónomos han descubierto un mundo lejano, denominado L91, que orbita mucho más allá del planeta enano Plutón, en las partes extremas del sistema solar.
El objeto parece estar en el proceso de cambiar gradualmente su camino moviéndose hacia el Sol desde el interior de la nube de Oort - una reserva de cometas y otros cuerpos de hielo - hacia el igualmente helado cinturón de Kuiper. Ningún objeto se ha visto antes haciendo esto, informa Nature.com.
El descubrimiento de L91 revela más sobre los mundos extremos cuyas órbitas se hallan más allá de la influencia gravitacional de Neptuno, el planeta gigante más distante en el Sistema Solar. Los investigadores aún tienen que explicar plenamente cómo estos cuerpos terminan en sus órbitas actuales. "Cada vez que nos encontramos con otro de estos objetos se añade otra pieza al rompecabezas", dice Meg Schwamb, un científico planetario del Observatorio Gemini en Hilo, Hawai.
Los astrónomos detectaron por primera vez L91 en septiembre de 2013 dentro del Outer Solar System Origins Survey y mediante el Telescopio Canadá-Francia-Hawaii en Hawaii. El grupo ha llevado a cabo un estudio detallado de una pequeña porción del cielo, con el objetivo de catalogar y describir los objetos del cinturón de Kuiper dentro.
La órbita elíptica de L91 nunca la acerca a la Tierra más de aproximadamente 50 veces la distancia Tierra-Sol (o unidades astronómicas). En su punto más lejano, el objeto alcanza las 1.450 UA de distancia. Eso significa que su órbita está más extendida, y se sitúa más lejos del Sol que mundos como Sedna y 2012 VP113.
La ubicación y la trayectoria de L91 hacen que sea "fascinante", dijo Michele Bannister, astrónomo de la Universidad Queen de Belfast. Reportó el hallazgo el 17 de octubre en una reunión conjunta de la División de la Sociedad Astronómica Americana de Ciencias Planetarias y el Congreso Europeo de Ciencia Planetaria.
L91 puede haber sido arrojado a su órbita a distancia por interacciones gravitatorias con Neptuno en el pasado distante.
Bannister y sus colegas creen que el objeto puede haber sido desterrado incluso a 2.000 UA del Sol antes de que comenzara su camino de regreso atraído por el tirón gravitacional de nuestra estrella. La órbita de L91 "está cambiando de una manera bastante notable", dijo.
Pero Konstantin Batygin, un astrónomo del Instituto de Tecnología de California en Pasadena, no está tan seguro. Él piensa que la sugerencia de que L91 fue lanzado primero hacia la nube de Oort y ahora se está moviendo hacia el interior es demasiado complicada. Sostiene que un planeta gigante invisible, como el Planeta Nueve que él y un colega propusieron en enero, podría ser el responsable de los cambios en la órbita de L91.
Bannister responde que L91 viaja en una órbita que está casi dentro del plano del sistema solar, en lugar de inclinarse a altos ángulos como podría esperarse si estuviera siendo ajetreado por el supuesto Planeta Nueve.