MADRID 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
La luna de Júpiter Io ha sufrido tres erupciones volcánicas masivas en un periodo de dos semanas. Lo ocurrido en este satélite, del tamaño de la Luna de la Tierra, lleva a los astrónomos a pensar que estos 'arrebatos' podrían ser mucho más comunes de lo que se creía. "Hasta ahora se registraba una gran erupción cada uno o dos años, y por lo general no eran tan potentes", ha explicado la responsable del trabajo, Imke de Pater.
"Se han sucedido tres 'arrebatos' extremadamente brillantes, que sugieren que, si miramos con más frecuencia, podríamos ver muchos más", ha añadido la científica.
Io es la más interna de las cuatro grandes lunas galileanas de Júpiter. Tiene cerca de 2.300 kilómetros de diámetro y la mayor actividad volcánica del Sistema Solar. En este sentido, los expertos destacan que es el único cuerpo con volcanes en erupción de lava muy caliente, como la observada en la Tierra. Además, debido a la baja gravedad de Io, las grandes erupciones volcánicas producen un paraguas de desechos que se elevan a cientos de kilómetros en el espacio.
Sin embargo, lo ocurrido en dichas semanas es, de momento, algo excepcional. La experta de la NASA, Ashley Davies, que también participa en la investigación, ha señalado que "estos nuevos acontecimientos entran dentro de un comportamiento raro en Io, debido a su tamaño y la asombrosa alta emisión térmica".
"La cantidad de energía que emiten estas erupciones implica fuentes de lava que brota de las fisuras en un volumen muy grande por segundo, formando flujos de lava que se extienden rápidamente por la superficie de Io", ha indicado.
COMPRENDER LA FORMACIÓN DE PLANETAS
De Pater descubrió las dos primeras erupciones masivas usando la cámara thenear infrarrojo (NIRC2) acoplada al sistema de óptica adaptativa del telescopio Keck II (Hawaii). La más brillante, procedente de un volcán conocido como 'Rarog Patera', se calcula que ha cubierto 45 kilómetros cuadrados con flujo de lava espesa, mientras que en el otro 'arrebato', en el cráter 'Heno Patera', los flujos cubren 120 kilómetros cuadrados.
Ambos acontecimientos se registraron en el hemisferio sur de Io, cerca de su extremidad, y ya habían desaparecido prácticamente cuando fueron fotografiados cinco días después.
La responsable de la investigación descubrió posteriormente una tercera y aún más brillante erupción --una de las más brillantes jamás vista en Io-- registrando una temperatura de erupción mucho más alta que las típicas de la Tierra. De Pater ha indicado que datos similares sólo se produjeron en la etapa formativa de la Tierra".
Según ha indicado, este hallazgo permitirá "entender los procesos que ayudaron a dar forma a las superficies de todos los planetas, incluida la Tierra y la Luna".
Al respecto ha indicado que se está "utilizando Io como laboratorio volcánico donde poder mirar hacia atrás en el pasado de los planetas y tener una mejor comprensión de cómo se producen las grandes erupciones, su periodicidad y cuánto tiempo duran", ha concluido Davies.