MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las galaxias de un cúmulo a unos 300 millones de años luz de la Tierra podrían contener hasta cien veces más materia oscura que materia visible, según un estudio australiano.
La investigación recurrió a simulaciones por ordenador para un estudio de gran alcance de las galaxias agrupadas en el Cúmulo de Coma, una de las estructuras más grandes del Universo, con miles de galaxias unidas por la gravedad.
"Se encontró que las galaxias podrían haber caído en el grupo hade 7.000 millones de años, algo que, si nuestras teorías actuales de la evolución de las galaxias son correctas, sugiere que debe tener un montón de materia oscura protegiendo a la materia visible de ser desgarrada por el cúmulo".
La materia oscura no puede verse, pero esta misteriosa sustancia se cree que representa alrededor del 84 por ciento de la materia en el Universo.
El estudiante de doctorado del Centro Internacional de Radioastronomía Cameron Yozin, quien dirigió el estudio, dice que por primera vez se demuestra que algunas galaxias precipitadas en un cúmulo podría tener plausiblemente tanto como 100 veces más materia oscura que materia visible.
Yozin, de la Universidad de Australia Occidental, dice que las galaxias que estudió en el cúmulo de Coma son del tamaño de nuestra propia Vía Láctea pero podrían contener solo el uno por ciento de estrellas.
A su juicio, estas galaxias parece que dejaron de formar estrellas cuando cayeron en el cúmulo hace entre siete y diez mil millones de años, lo que lleva a los astrofísicos a etiquetarlas como galaxias fallidas. Este desenlace de la formación de estrellas se conoce como 'apagado'.
"Las galaxias originalmente se formaron cuando grandes nubes de gas de hidrógeno colapsaron y se convirtieron en estrellas: si se quita ese gas, la galaxia no puede crecer aún más", dice Yozin.
"Caer en un cluster es una forma en que esto puede suceder. Las enormes fuerzas gravitacionales presionan sobre la galaxia, pero su gas es empujado fuera y esencialmente robado por gas caliente en el propio cúmulo".
"Por primera vez, mis simulaciones demostraron la tesis de que las galaxias podrían haber quedado apagadas por el cúmulo tan pronto como hace 7.000 millones de años".
"Sin embargo, han podido evitar ser desgarradas en este entorno porque cayeron en suficiente materia oscura como para proteger su materia visible".
Esta investigación fue motivada por el reciente descubrimiento observacional de estas galaxias por un equipo americano y canadiense dirigido por el profesor Pieter van Dokkum, de la Universidad de Yale.