MADRID, 13 Mar. (EUROPA PRESS) - Esta animación muestra la cantidad de luz detectada por cada píxel en una pequeña sección de la cámara a bordo del telescopio espacial Kepler de la NASA, en cuyo centro aparece TRAPPIST-1. Esta estrella enana ultra fría a unos 40 años luz de la Tierra, contiene hasta siete planetas, supuestamente rocosos, de un tamaño parecido a nuestro planeta, y de los que tres están en zona habitable, con posibilidad de albergar agua líquida. No son directamente visibles en la imagen. Kepler detecta un cambio en brillo cuando un planeta pasa delante de una estrella desde el punto de vista del telescopio. Los planetas en tránsito bloquean una pequeña fracción de luz estelar que produce minúsculas inmersiones en el brillo de su estrella anfitriona. Un planeta de tamaño Tierra que pasa delante de una pequeña estrella enana ultrafria como TRAPPIST-1 reduce menos de un 1% de brillo y no es visible a simple vista. Los astrónomos usan algoritmos sofisticados para buscar los datos de estas inmersiones en brillo y, en particular, para corregir los pequeños movimientos en el espacio, el "parpadeo" de los píxeles vistos en la animación de imágenes. Durante el período del 15 de diciembre de 2016 y el 4 de marzo, la nave espacial Kepler, operando como misión K2, observó TRAPPIST-1 durante 74 días. Esta animación muestra 60 mediciones de brillo o fotos tomadas por la cámara de Kepler a bordo una vez por minuto durante una hora el 22 de febrero. Denominada un archivo de píxeles de destino, la imagen cubre un área de 11 píxeles cuadrados o 44 segundos cuadrados del cielo. Esta área es equivalente en tamaño a ver un grano de arena a la longitud de los brazos estirados hacia el cielo.