MADRID, 30 Ago. (EUROPA PRESS) - Una investigación basada en el proceso de datos con la tecnología de la red neuronal concluye que el cambio climático en curso es natural, y no derivado de emisiones de origen humano. La mayoría de los científicos de todo el mundo han alcanzado un consenso sobre el calentamiento global, está sucediendo, y está sucediendo porque los seres humanos han expulsado tanto CO2 a la atmósfera. Pero la bióloga australiana Jennifer Marohasy y el informático John Abbot afirman que este consenso está construido sobre una base defectuosa, que se decidió hace casi un siglo, cuando se trabajó para conocer el potencial de absorción de calor del dióxido de carbono. En su trabajo, publicado en la revista GeoResJ, sugieren además que tan poco trabajo se ha hecho desde ese momento aplicando los principios a nivel mundial que es imposible demostrar que el dióxido de carbono tiene la capacidad de impactar las temperaturas mundiales. Por esa razón, comenzaron a recolectar datos de estudios previos que ofrecían un medio de lectura de la temperatura durante los últimos 2000 años: anillos de árboles, núcleos de coral, etc. Incorporaron esos datos en una red neuronal que Abbot ha estado usando para predecir los patrones de lluvia en Australia durante los últimos años. La red funciona mirando los patrones y aprendiendo sobre situaciones dadas --en este caso, los patrones de temperatura global a lo largo de 2000 años--, y luego ofrece predicciones. Los investigadores informan que la computadora predijo que las temperaturas aumentarían en aproximadamente la misma manera que se han basado en medidas del mundo real -en ausencia de dióxido de carbono añadido- lo que sugiere que el dióxido de carbono no es la causa. También señalan que hubo un tiempo conocido como el período cálido medieval que se extendió desde aproximadamente 986 a 1234, cuando las temperaturas eran aproximadamente iguales a las de hoy. Esto, sugieren los dos investigadores, ofrece evidencia de que el planeta se habría calentado en la medida en que lo haya hecho, independientemente de si los humanos bombearon dióxido de carbono a la atmósfera durante cien años o no. Señalan que sus resultados también mostraron que los promedios de temperatura global disminuyeron después de 1980, lo cual coincide con la desaceleración observada por otros científicos, pero no se explica completamente. Ellos sugieren que el calentamiento que ahora estamos experimentando es sobre todo natural y que probablemente se reducirá tal como lo ha hecho en el pasado. La investigación fue financiada por la B. Macfie Family Foundation. La publicación GeoResJ será discontinua a partir de enero de 2018 y está cerrada a nuevas presentaciones.