MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
Este 7 de marzo se cumplen exactamente 140 años de que Alexander Graham Bell patentase el teléfono, referido como un aparato que transmitía sonidos por un cable a través de señales eléctricas.
Durante mucho tiempo Bell fue considerado el inventor del teléfono, junto con Elisha Gray. Sin embargo, el investigador escocés no fue el inventor de este aparato, sino solamente el primero en patentarlo.
El 11 de junio de 2002 el Congreso de Estados Unidos aprobó la resolución 269, por la que se reconocía que el inventor del teléfono había sido Antonio Meucci, que lo llamó teletrófono, y no Bell. En 1871 Meucci solo pudo, por dificultades económicas, presentar una breve descripción de su invento, pero no formalizar la patente ante la Oficina de Patentes de Estados Unidos.
Tras patentarlo, Bell comenzó una serie de demostraciones y conferencias públicas para introducir su teléfono entre la comunidad científica así como al público en general. Su demostración en la exposición del centenario en Filadelfia de 1876, hizo del teléfono la noticia de titulares alrededor del mundo, según Wikipedia.
Influyentes visitantes como el Emperador Pedro II de Brasil pudieron observar el invento. Hasta la Reina Victoria pidió una audiencia privada en el Castillo de Osborne, y calificó la demostración de "extraordinaria". El entusiasmo que rodeaba a las demostraciones en público de Bell ayudó a la aceptación del revolucionario dispositivo.
La Bell Telephone Company fue creada en 1877 y para 1886, más de 150.000 personas en los Estados Unidos poseían teléfonos. Los ingenieros de la compañía de Bell llevaron a cabo numerosas mejoras al teléfono, que se convirtió en uno de los productos más exitosos. En 1879, la compañía de Bell adquirió las patentes de Edison para el micrófono de carbón de la Western Union. Esto hizo el teléfono práctico para las largas distancias, al contrario del transmisor accionado por voz de Bell que requería que los usuarios gritaran en él para que se oyera en el teléfono de recepción, aún en las distancias cortas.
El 25 de enero de 1915 Alexander Graham Bell envió la primera llamada telefónica transcontinental, desde el 15 de Day Street en la ciudad de Nueva York, que fue recibida por Thomas Watson en la 333 de Grant Avenue en San Francisco, California.