MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
Un examen del repertorio de receptores olfativos (OR, por sus siglas en inglés) codificado en 13 especies de mamíferos indica que los elefantes africanos tienen el mayor número de genes OR, dos veces más que los perros y cinco veces más que los seres humanos.
Asi lo revela un estudio publicado este martes en 'Genome Research' por investigadores del 'Cold Spring Harbor Laboratory', en Nueva York, Estados Unidos
El sentido del olfato es fundamental para la supervivencia en muchos mamíferos, puesto que la capacidad de distinguir diferentes olores es importante para olfatear los alimentos, evitar a los depredadores y buscar compañeros. Para caracterizar las capacidades olfativas de diferentes mamíferos, los autores examinaron las secuencias del genoma de 13 mamíferos placentarios e identificaron más de 10.000 genes OR en total.
El repertorio de genes OR que encontrado en cualquiera de las especies fue muy singular, puesto que las 13 especies de animales analizadas sólo comparten y han conservado evolutivamente tres genes OR. Sorprendentemente, el elefante africano tuvo el repertorio olfativo más amplio, con casi 2.000 genes OR.
"Las funciones de estos genes no se conocen bien, pero probablemente son importantes para las condiciones de vida de los elefantes africanos -apunta el autor Yoshihito Niimura--. Al parecer, la trompa de un elefante no sólo es larga, sino también superior". Por el contrario, los seres humanos, junto con sus parientes primates, tienen muchos menos genes OR en comparación con el resto de especies examinadas, posiblemente como resultado de la disminución de su dependencia del olfato a medida que mejoró su agudeza visual.
Los autores rastrearon la historia evolutiva de los genes OR utilizando una nueva herramienta computacional para deducir genes ancestrales y luego examinaron su duplicación o pérdida de cada especie. Algunos linajes de genes OR aumentaron considerablemente en una especie determinada, como por ejemplo un gen ancestral que se ha duplicado en los elefantes, generando 84 genes distintos (los humanos y otros primates sólo tienen una copia), mientras que otros linajes de genes OR se han perdido por completo.
El repertorio olfativo único de cada especie, como resultado de cientos de duplicaciones de genes y supresiones durante la evolución, marca la base molecular de las diferencias en el olfato de los organismos. "Comparar los repertorios de los genes OR entre los mamíferos nos permite conocer las similitudes y diferencias en la percepción olfativa, ampliando nuestra comprensión sobre el sentido del olfato en los humanos", concluye Niimura.