MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
Una gran parte de la superficie helada de Plutón se renueva constantemente por un proceso llamado convección, que reemplaza la superficie de hielo antiguo por otro más reciente.
La combinación de modelos de ordenador con datos de topografía y composición recogidos por la nave espacial New Horizons de la NASA el pasado verano, miembros del equipo de la misión New Horizons han determinado la profundidad de esta capa de hielo de nitrógeno sólido dentro del rasgo distintivo conocido como 'corazón' de Plutón - una amplia llanura informalmente llamada Sputnik Planum - y la rapidez con la que el hielo está fluyendo. El estudio se publica en la revista Nature.
Científicos de la misión utilizan simulaciones por ordenador para mostrar que el área de Sputnik Planum está cubierta de polígonos convectivos de hielo de 16 a 48 kilómetros de diámetro, y menos de un millón de años de edad.
Los resultados ofrecen información adicional sobre la geología inusual y muy activa en Plutón y, quizás, de otros órganos como este planeta enano en las afueras del sistema solar, informa la NASA.
"Por primera vez, podemos determinar qué son esas extrañas marcas en la superficie de Plutón", dijo William B. McKinnon, de la Universidad de Washington en St. Louis, quien dirigió el estudio y mimebro del equipo científico de New Horizons. "Hemos encontrado pruebas de que en incluso en fríos planetas a miles de millones de kilómetros de la Tierra hay energía suficiente para una actividad geológica vigorosa, siempre y cuando exista un material adecuado, en este caso algo tan suave y flexible como nitrógeno sólido."
McKinnon y sus colegas creen que el patrón de estas células o polígonos se deriva de la lenta convección térmica de los hielos de nitrógeno que llenan Sputnik Planum. Un tanque que puede tener kilómetros de profundidad millas en algunos lugares, donde el nitrógeno sólido es calentado por el modesto calor interno de Plutón, hasta hacer que se levante y forme grandes manchas - como una lámpara de lava - antes de refrescarse y hundirse de nuevo para renovar el ciclo.
Los modelos de ordenador muestran que el hielo sólo tiene que ser de algo más de 3 kilómetros de profundidad para que este proceso ocurra, y que las células de convección son muy amplias. Los modelos muestran que esas bolsas de nitrógeno sólido pueden evolucionar lentamente y combinarse a lo largo de millones de años. Las crestas que marcar donde se enfrió el hielo de nitrógeno y volvió a sumergirse pueden ser estranguladas y abandonadas, resultando en características en formas de Y o X donde tres o cuatro células de convección se unen.
"Sputnik Planum es uno de los más sorprendentes descubrimientos geológicos en más de 50 años de exploración planetaria", dice Alan Stern, investigador principal de New Horizons, del Southwest Research Institute, Boulder, Colorado.
Estos movimientos de convección se traducen en sólo unos pocos centímetros por año --casi tan rápidamente como el crecimiento de las uñas-- lo que significa que las células reciclan sus superficies cada 500.000 años aproximadamente. Aunque lento para los relojes humanos, es un ritmo rápido en escalas de tiempo geológicas.