MADRID, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
El denominado efecto Unruh, que predice una exposición creciente a la radiación cósmica a medida que una nave tripulada acelerase en el espacio, podría ser confirmado con la tecnología ya existente.
Hace cuarenta años, el físico canadiense Bill Unruh hizo una predicción sorprendente con respecto a la teoría cuántica de campo. Conocido como el efecto de Unruh, su teoría predijo que un observador acelerado se vería abrasado como resultado de un baño termal de partículas, mientras que un observador inercial no estaría expuesto a ninguna clase de efecto.
Un equipo de investigadores de Sao Paulo, Brasil, considera en un estudio cómo el efecto Unruh podría ser confirmado usando un experimento simple que se basa en la tecnología existente. No sólo este experimento probaría de una vez por todas si el efecto Unruh es real, también podría ayudarnos a planear el día en que el viaje interestelar se convierta en una realidad, informa Universe Today.
Para decirlo en términos sencillos, la Teoría de la Relatividad de Einstein afirma que el tiempo y el espacio dependen del marco de referencia inercial del observador. En consonancia con esto, es la teoría de que si un observador está viajando a una velocidad constante a través del vacío, se dará cuenta de que la temperatura de dicho vacío es cero absoluto. Pero si comenzaran a acelerarse, la temperatura del espacio vacío se volvería más caliente.
Dirigidos por Gabriel Cozzella, del Instituto de Física Teórica (IFT) de la Universidad Estatal de Sao Paulo, los autores del nuevo estudio sostienen que sería posible detectar el efecto de Unruh midiendo lo que se conoce como radiación de Larmor. Esto se refiere a la energía electromagnética que se irradia lejos de partículas cargadas (como electrones, protones o iones) cuando aceleran.
Como describen en su estudio, publicado en arxiv.org, esto consistiría en monitorear la luz emitida por electrones dentro de dos marcos de referencia separados. En el primero, conocido como el "marco acelerador", los electrones son disparados lateralmente a través de un campo magnético, lo que causaría que los electrones se muevan en un patrón circular. En el segundo, el "marco de laboratorio", un campo vertical se aplica para acelerar los electrones hacia arriba, haciendo que sigan un camino de sacacorchos.
En el marco acelerado, Cozzella y sus colegas asumen que los electrones encontrarían la "niebla de fotones", donde ambos los irradian y los emiten. En el marco del laboratorio, los electrones se calentarían una vez que se aplicara la aceleración vertical, haciendo que mostraran un exceso de fotones de longitud de onda larga. Sin embargo, esto sería dependiente de la "niebla" existente en el marco acelerado para empezar.
En resumen, este experimento ofrece una prueba simple que podría determinar si existe o no el efecto Unruh, que es algo que ha estado en disputa desde que se propuso. Una de las atracciones del experimento propuesto es que podría ser conducido usando aceleradores de partículas y electroimanes que están actualmente disponibles, informa Universe Today.
Si los experimentos tuvieran éxito y se demostrara que el efecto Unruh existe, tendría ciertamente consecuencias para cualquier misión espacial futura que dependa de sistemas avanzados de propulsión. Entre Project Starshot y cualquier misión propuesta que involucre enviar un equipo a otro sistema de estrellas, los efectos agregados de una "niebla de fotones" y un "baño termal" tendrán que ser tomados en cuenta.