PUERTOLLANO, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
El satélite DEIMOS-2, de alta resolución y fabricado íntegramente en Puertollano con un presupuesto inicial de 60 millones de euros, ha sido puesto en órbita a las 21.11 horas desde el Complejo de Lanzamiento de Yasny (Rusia) por el lanzador ruso-ucraniano Dnepr.
Una vez puesto en funcionamiento, se espera que DEIMOS-2 capte imágenes precisas de la superficie terrestre durante los próximos 7 años, lo que servirá para obtener información muy precisa a peticiones de clientes.
El director general de Elecnor Deimos, Miguel Belló, ha explicado desde Puertollano que los potenciales clientes de este satélite pueden ser "principalmente gobiernos y grandes empresas" relacionadas con ámbitos como medio ambiente, cambio climático, control de crisis y protección civil, así como defensa, inteligencia y control de fronteras.
El desarrollo de esta misión "se ha realizado en un tiempo récord de tres años" según Belló, quien ha incidido en que gracias a este satélite "se mejorará el conocimiento de fenómenos naturales que ocurren en el planeta y se contribuirá a prevenir y gestionar posibles crisis de carácter natural".
Para la integración y posterior control de la misión del satélite Elecnor Deimos ha desarrollado el innovador Centro de Integración y Operaciones de Satélites de Puertollano, con una inversión de cerca de 8 millones de euros, desde donde se centralizarán las diferentes operaciones.
A lo largo de la próxima semana se espera que lleguen las primeras imágenes, para lo cual, según ha detallado Bellón. "el satélite debe hacer un ajuste de blanco pasando por la Antártida y otro de negro en el Pacífico, en plena noche".
En el acto de lanzamiento, que se ha seguido en directo desde Puertollano, han estado presentes diferentes personalidades, entre las que se encontraba la alcaldesa, Mayte Fernández, quien ha agradecido la confianza de Elecnor "desarrollando este proyecto en la ciudad".
SEGUNDA MISIÓN DE ELECNOR
Ésta será la segunda operación que lleve a cabo Elecnor Deimos, ya que en julio de 2009 puso en órbita el DEIMOS-1, que destacó por ser el primer satélite español de observación de la Tierra y el primero europeo de iniciativa íntegramente privada, que ha sido "un referente mundial", según Belló.
Este segundo proyecto pesa 300 kilos y tiene unas dimensiones de dos metros de alto por un metro y medio de ancho, e incorpora una cámara que consigue imágenes de gran precisión y detalle, con 75 centímetros de resolución y con capacidad de obtener 800 veces más datos y detalles de la zona que su antecesor.