MADRID 23 May. (EUROPA PRESS) -
Una medida muy precisa de la distancia a un sistema estelar ha permitido a los astrónomos resolver finalmente un enigma de hace diez años, lo que afianza la comprensión de la forma en la que los objetos exóticos, como los agujeros negros, interactúan con las estrellas cercanas, publica 'Science'.
Un equipo de astrónomos dirigido por James Miller-Jones desde el núcleo del Centro Internacional de Investigación en Radioastronomía (ICRAR, en sus siglas en inglés) de la 'Curtin University', en Australia, ha medido la distancia a la estrella del sistema SS Cygni, que está a 372 años luz, 148 años más cerca que la medición anterior del Telescopio Espacial Hubble.
La medida fue posible gracias a los astrónomos aficionados de la Asociación Americana de Observadores de Estrellas Variables (AAVSO) que alertó al equipo de científicos de los cambios en el sistema de la estrella compacta, lo que provocó que los científicos iniciaran las observaciones con dos de los radiotelescopios más precisos del mundo.
El equipo de investigadores liderado por el doctor Miller-Jones midió la oscilación anual del sistema en comparación con distantes galaxias de fondo, lo que hizo posible tomar datos concretos de la distancia a la SS Cygni con una precisión sin precedentes. Este experto explica que midieron cuánto se muevo SS Cygni en comparación con algunas galaxias muy distantes.
La distancia a SS Cygni había sido medida usando el Telescopio Espacial Hubble, en 1999 y 2004, produciendo un resultado desconcertante mucho mayor de lo previsto, a una distancia de unos 520 años luz. "Si SS Cygni estaba en realidad tan lejos como Hubble midió, entonces era demasiado brillante para ser lo que creíamos que era y se habría tenido que replantear la física de cómo los sistemas como éste trabajaban", concreta Miller-Jones.
Este astrónomo dijo que SS Cygni, en la constelación de Cygnus, el Cisne, es un sistema estelar doble que contiene una estrella roja de baja masa normal y una estrella enana blanca, que se orbitan entre sí en sólo alrededor de 6,6 horas y en una media de una vez cada 49 días, una poderosa explosión ilumina en gran medida el sistema. Una enana blanca es el remanente de una estrella como el Sol que se ha quedado sin combustible y se derrumba en un objeto del tamaño de la Tierra y, como es tan densa, su fuerte gravedad tira gas fuera de su estrella compañera, que luego se arremolina alrededor de la enana blanca.
En ocasiones, el flujo de gas sobre la enana blanca se incrementará dramáticamente, haciendo que el sistema aparezca hasta 40 veces más brillante en luz visible. Es sólo durante estos períodos raros que el sistema de la estrella emite ondas de radio, lo que permiten una medida mucho más precisa de la distancia.
"Nuestra ventaja clave fue usar radiotelescopios para observar el sistema. En la luz visible, los telescopios ópticos como el Hubble permiten ver cientos de estrellas diferentes, todos ellas moviéndose en distintas cantidades, mientras que las ondas de radio en el fondo con el que se comparan está mucho más lejos y, por lo tanto, no parecen moverse en absoluto", destacó el coautor Gregory Sivakoff, profesor de la Universidad de Alberta, en Canadá.
El equipo utilizó grupos de telescopios llamados 'Very Long Baseline Array' (VLBA) en Estados Unidos y 'European Very Long Baseline Interferometry Network' (EVN) en Europa y Sudáfrica para determinar la ubicación exacta del sistema en relación con las galaxias de fondo. "El sistema sólo emite ondas de radio durante un corto período de tiempo, sin la cooperación de nuestros muchos observadores aficionados que miran SS Cygni noche tras noche, no habríamos sabido cuándo mirar. Su aportación fue muy valiosa", agradece Matthew Templeton, de la AAVSO.
La distancia medida de poco más de 370 años luz significa que la luz detectada por el equipo a la izquierda de SS Cygni en la época del famoso físico Sir Isaac Newton nació en la década de 1600. "El tirón de gas de una estrella cercana a la enana blanca en SS Cygni es el mismo proceso que ocurre cuando las estrellas de neutrones y agujeros negros orbitan con un compañero cerca, así que mucho esfuerzo ha ido dedicado a la comprensión de cómo esto funciona", reveló Dr. Miller-Jones, quien subraya que la nueva medición ha resuelto el enigma del brillo de SS Cygni.