Foto: NASA
MADRID, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
El rover Curiosity de la NASA ha comenzado a inspeccionar su nuevo camino para llegar al Monte Sharp, un recorrido algo 'más suave' que el anterior y que evitará dañar más sus ruedas. A través de una fotografía enviada por el aparato, el equipo de la misión tendrá que decidir ahora si éste es el camino correcto para que Curiosity sufra menos daños.
Según ha explicado la agencia espacial estadounidense, este nueva travesía se extiende hacia el suroeste del planeta y tiene la ventaja de que es un área donde se han encontrado evidencias de condiciones favorables para la vida microbiana. De esta forma, el nuevo trayecto puede añadir más logros científicos a la misión.
Por el momento, Curiosity se mantiene quieto en una duna, conocida como 'Dingo Gap', de un metro de altura. Desde esta 'cima' ha conseguido la imagen de su nuevo camino y, si la respuesta de los expertos es afirmativa, sólo tendrá que atravesar el cúmulo de arena para comenzar su nueva aventura.
DESTINO MONTE SHARP
El rover de la NASA comenzó su viaje el pasado mes de julio y, desde entonces, ha estado recorriendo la superficie marciana mientras los miembros de control en Tierra han ido examinando sus instrumentos para evitar posibles daños. De hecho, en estos meses, Curiosity ha sufrido varios problemas en su software, que han sido solucionados restaurando sus sistemas, y se ha detectado algunos daños en sus ruedas.
En cuanto a su destino, los expertos han fijado su mirada en el Monte Sharp, que mide 5.500 metros, porque creen que entre sus capas sedimentarias se conservan miles de millones de años de historia geológica, incluyendo el antiguo periodo de tiempo en que Marte fue mucho más húmedo y más cálido que actualmente, es decir, más acogedor para el origen de la vida.