MADRID 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
Una nueva reconstrucción del clima de los últimos mil años en la Península Antártica muestra que el derretimiento del hielo de verano, que afecta a la estabilidad de las plataformas de hielo y los glaciares del Antártico, se ha intensificado casi diez veces y, sobre todo, desde mediados del siglo XX, según concluye una investigación, publicada esta semana en la revista 'Nature Geoscience'.
En 2008, un equipo científico de Reino Unido y Francia perforó un núcleo de 364 metros de hielo lejos de la isla James Ross, cerca de la punta norte de la Península Antártica, para medir las temperaturas del pasado de la zona. Estos investigadores descubrieron que este núcleo de hielo también podría dar una visión única e inesperada en el derretimiento del hielo en la región.
Las capas visibles en el núcleo de hielo indican períodos en los que la nieve de verano en la capa de hielo se descongeló y luego se recongeló. Al medir el espesor de las capas de fusión, los científicos fueron capaces de examinar la historia de fusión en relación con los cambios de temperatura en el lugar de núcleo de hielo durante los últimos mil años.
El autor principal, el doctor Abram Nerilie, de la Universidad Nacional de Australia y el 'British Antarctic Survey' (BAS), dice: "Hemos encontrado que las mejores condiciones de la Península Antártica y la menor cantidad de fusión de verano ocurrió alrededor de hace 600 años, cuando las temperaturas eran alrededor de 1,6 º C por debajo de los registradas en el siglo XX y la cantidad de nieve caída anual que se derritió y recongeló fue de aproximadamente 0,5 por ciento. Hoy, vemos casi diez veces más (5 por ciento) de fusión de nieve anual cada año".
"El derretimiento de verano en el sitio central del hielo hoy se encuentra en un nivel que es más alto que en cualquier otro momento durante los últimos mil años. Y mientras que las temperaturas en este sitio se incrementaron gradualmente en fases a lo largo de muchos cientos de años, la mayor parte de la intensificación de la fusión ha ocurrido desde mediados del siglo XX", agrega este experto.
"Tener un registro de la intensidad de fusión anterior de la Península es particularmente importante debido a la retracción de los glaciares y la pérdida de capa de hielo que ahora estamos viendo en la zona. El derretimiento del hielo de verano es un proceso clave que se cree que ha debilitado las barreras de hielo a lo largo de la Península Antártica dando lugar a una sucesión de colapsos dramáticos, así como la aceleración de la pérdida de hielo glaciar en toda la región durante los últimos 50 años", apostilla Robert Mulvaney, de la 'British Antarctic Survey', que llevó la expedición de perforación del núcleo de hielo.
En otras partes de la Antártida, como la hoja de hielo de la Antártida Occidental, la situación es más compleja y no está claro que los niveles de hielo se derritan, además de que la reciente pérdida de glaciares son excepcionales o causadas por el cambio climático inducido por el hombre.
"Este disco nuevo del núcleo de hielo muestra que incluso los pequeños cambios de temperatura pueden dar lugar a un gran aumento en la cantidad de fusión en lugares donde las temperaturas de verano están cerca de 0 °C, como a lo largo de la Península Antártica y esto tiene importantes implicaciones para la inestabilidad del hielo y el aumento del nivel del mar en un clima más cálido", concluye Abram.