Foto: PABLO GIL, JM CABALLERO Y DAVID ALARCÓN
MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las orcas se mantuvieron estables en cuanto a tamaño de población durante la mayor parte del Pleistoceno (hace entre 2,5 millones y 11.000 años) pero luego sufrieron un rápido descenso y un cuello de botella (cuando una especie experimenta un importante descenso en el número de miembros llegando, incluso, al borde de la extinción) en el último gran periodo de la Edad de Hielo (hace entre 110.000 y 12.000 años).
Aunque la mayoría de las poblaciones se redujeron, una población fuera del sur de África se mantuvo estable. En consonancia con la población de cuello de botella, también hubo una baja diversidad genética, con la excepción de una población refugiada frente a las costas de Sudáfrica, según concluye una investigación de la Universidad de Durham.
"Nuestros datos apoyan la idea de un cuello de botella poblacional que afectó a las ballenas asesinas en un amplio rango geográfico y que condujo a la pérdida de la diversidad", señalan los autores de este estudio, que se publica en 'Molecular Biology and Evolution'.
"La población de Sudáfrica destaca como una excepción, lo que puede deberse a las condiciones locales que eran productivas y estables a lo largo del último millón de años más o menos", agregan. Así, la última Era Glaciar pudo haber sido perjudicial para el mayor depredador de los océanos y verse significativamente afectado en su diversidad poblacional.