MADRID 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
El proyecto de Cartografiado para la Energía oscura (DES, por sus siglas en inglés) buscará respuestas a la expansión del Universo y a la naturaleza de la energía oscura durante los próximos cinco años, en el marco de una misión que se puso en marcha el pasado 31 de agosto en la que participan físicos y astrónomos de varios países, entre los que se encuentra España.
En concreto, el proyecto --resultado del esfuerzo de 10 años de planificación, construcción y pruebas-- cuenta con la participación de 120 científicos de 23 instituciones de Estados Unidos, Brasil, Alemania, Suiza, Reino Unido y España.
En el caso de España, han colaborado el Instituto de Ciencias del Espacio (CSIC/IEEC), el Institut de Física d'Altes Energías (IFAE), la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) y el Centro de Investigaciones Energeticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT).
Los científicos del equipo de investigación se asignarán de forma sistemática una octava parte del Universo con el fin de cartografiar el cielo del Hemisferio Sur "con enorme detalle", y averiguar de este modo el por qué de la expansión del Universo y sus vínculos con la energía oscura, probable causante de esta aceleración, según se detalla en la web del proyecto.
Para ello, utilizarán 'DECam', una cámara digital de cinco lentes y 570 megapíxeles, construida en Fermilab e instalada en el telescopio Víctor Manuel Blanco, en el Observatorio Interamericano Carro Tololo (CTIO), en los Andes chilenos. Esta cámara de energía oscura permite captar en cada instantánea la luz de más de 100.000 galaxias situadas a distancias de hasta 8 millones de años.
En la construcción de esta cámara ha participado tanto el CIEMAT, con la contribución de la UAM, como el ICE (CSIC/IEEC) y el IFAE, diseñando, construyendo y verificando la electrónica de alta velocidad que realiza la lectura y control de los detectores CCD de la cámara.
Además, han diseñado e implementado el software que permite que el telescopio apunte con precisión y han producido simulaciones informáticas de la estructura a gran escala del universo, que permiten desarrollar y probar los métodos de análisis científico e interpretar las observaciones.
"Es emocionante ver que algunos sueños se hacen realidad y que podremos por fin investigar la naturaleza de esta energía oscura responsable de la expansión acelerada del universo", ha indicado Juan García-Bellido, de la Universidad Autónoma de Madrid.
Los investigadores prevén que obtendrán imágenes en color de 300 millones de galaxias y 100.000 cúmulos de galaxias, y calculan poder descubrir hasta 4.000 nuevas supernovas, muchas de los cuales se formaron cuando el Universo tenía la mitad de su tamaño actual. Los datos recogidos serán tratados en el Centro Nacional para Aplicaciones de Supercomputación (NCSA) de la Universidad de Illinois (EEUU).
Para medir la energía oscura, se contarán cúmulos de galaxias, se medirán las supernovas, se estudiará la distorsión de la luz que proviene de galaxias lejanas y cambia al encontrarse con la materia oscura, y se utilizarán ondas de sonido para crear un mapa a gran escala de la expansión del Universo.
"El DES indagará en algunas de las preguntas más importantes acerca de nuestra existencia", ha asegurado el director adjunto de Física de Altas Energías del Departamento de la Oficina de Ciencia de Energía de Estados Unidos, James Siegrist, que ha vaticinado que "en cinco años, se va a estar mucho más cerca de las respuestas", además de ampliar el conocimiento del Universo.
"Es un momento emocionante en la cosmología, ya que las observaciones del Universo pueden aportar información acerca de la naturaleza fundamental de la materia, energía, espacio y tiempo", ha añadido por su parte el director de DES Josh Frieman, del departamento de Laboratorio del Acelerador Nacional Fermi de Energía de Estados Unidos.