MADRID, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
Un bastón de hueso con ornamentación tallada encontrado en Polonia Central, proporciona evidencia de intercambio entre comunidades mesolíticas europeas alejadas entre sí.
Artefactos y materias primas pueden proporcionar una visión de cómo las comunidades prehistóricas intercambiaron regalos, como piedras transportadas por su importancia tecnológica, o productos de metal que adornan las tumbas.
Recientemente, Grzegorz Osipowicz y colegas de la Universidad Nicolás Copérnico, en Polonia, encontraron un bastón decorado con dibujos tallados de un cuerno de origen desconocido en un sitio arqueológico en Polonia central. Para investigar las especies de origen de la cornamenta y su origen geográfico, los científicos llevaron a cabo un análisis de ADN y de isótopos estables del artefacto.
El material de origen fue identificado como cornamenta de una especie de reno que el análisis de dispersión reveló tener un rango limitado al norte de Escandinavia y al noroeste de Rusia durante el Holoceno Temprano. Esto puede sugerir que el artefacto fue transportado del norte de Karelia a Polonia central.
Las razones por las que este artefacto fue transportado son objeto de especulación, pero los autores sugieren que sus resultados son una posible evidencia del flujo de bienes entre grupos de cazadores-recolectores a gran distancia. A su juicio, este estudio proporciona una nueva visión de cómo se intercambiaron ideas y artículos en las comunidades del Mesolítico en el noreste de Europa.
"La ruta tomada para transportar el asta de 'Rangifer tarandus' desde la cercana Karelia a Polonia Central, y el motivo para llevarlo, sigue siendo imposible de determinar de manera concluyente --dice Osipowicz--. Sin embargo, los resultados obtenidos son la primera evidencia directa del flujo de mercancías entre grupos de cazadores-recolectores en el Holoceno Temprano a una distancia tan grande".
El estudio se publica en PLOS ONE.