MADRID, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un trozo de ámbar de 100 millones de años de antigüedad encontrado en Myanmar contiene la cabeza, cuello, ala, cola y patas de un pájaro recién salido del huevo, atrapado en savia que brotaba de un árbol.
"Es la visión más completa y detallada que jamás hemos tenido", dijo a New Scientist Ryan McKellar, del Royal Saskatchewan Museum de Regina, en Canadá, miembro del equipo que describió el hallazgo. "Ver algo tan completo es asombroso. Es simplemente impresionante".
Aunque parece como si la piel y la carne reales del pájaro se preservasen en el ámbar, es básicamente una impresión muy detallada del animal, dice McKellar. Estudios de hallazgos similares muestran que la carne se ha degradado en carbono, y no hay ADN utilizable.
El ámbar conserva algunos de los colores de las plumas, pero en este caso no son muy llamativos, admite McKellar. "Ellos eran pequeños pájaros marrones."
Pertenecía a un grupo de pájaros conocidos como enantiornites o 'pájaros opuestos', que vivían junto a los antepasados de las aves modernas y que prosperaron hasta que murieron con los dinosaurios hace 66 millones de años.
El nuevo hallazgo se suma a la evidencia anterior de su capacidad para el vuelo, ya que la cría tenía un conjunto completo de plumas de vuelo y le estaban creciendo las plumas de la cola, pero extrañamente en su mayoría carecía de plumas del cuerpo en lugar de estar cubierto como las crías de hoy.
Probablemente, nacieron en el suelo y treparon a los árboles, dice McKellar, lo que los hacía particularmente propensos a quedarse atrapados en la savia.