La campaña por el cierre de los CIES denuncia en el juzgado malos tratos "sistemáticos" en Zapadores

Actualizado: miércoles, 19 enero 2011 14:23

VALENCIA 19 Ene. (EUROPA PRESS) -

La campaña por el cierre de los Centros de Internamiento para extranjeros (CIES) ha presentado ante el juzgado de instrucción número 3 de Valencia una denuncia "motivada por el registro de numerosos testimonios de las víctimas de reclusión que se quejan de malos tratos sistemáticos" en el centro de Zapadores "por parte de la policía que custodia el centro y los cuerpos antidisturbios", según ha anunciado en rueda de prensa esta organización.

Según la denuncia, varios reclusos han sido víctimas de golpes, patadas y palizas, "bien con previa provocación por parte de agentes de policía, que nunca llevan la debida identificación, bien como castigo colectivo ante actitudes de protesta de los reclusos", han afirmado. Asimismo, aseguran que el uso de celdas de castigo es "indiscriminado" y que existen deficiencias en la defensa jurídica de los presos.

Los testimonios, firmados por "decenas de reclusos" relatan como un interno de nacionalidad argelina "recibió golpes por parte de uno de los policías que custodian a los internos, sin que mediara ninguna provocación por su parte, el día 30 de noviembre de 2010, en el interior del CIE, en concreto, en la celda de castigo o calabozo a la que fue llevado sobre las 17.00 horas" de la que salió a las 23.00 horas.

Según la denuncia, como consecuencia de los golpes sufrió "un fuerte dolor en el brazo izquierdo, acompañado de falta de movilidad normal". Según indican, acudió el médico del centro a verle en el calabozo, pero no le dio ningún analgésico ni autorizó su traslado al hospital.

PÉRDIDA DE CONOCIMIENTO

La misma persona, consta en la denuncia, "tanto unos días antes como unos días después fue igualmente golpeado por parte de varios de los policías del centro, que entraron a su dormitorio y le arrojaron al suelo, dándole patadas, llegando incluso a perder el conocimiento en una ocasión, siendo testigos sus compañeros de celda".

Asimismo, se relata que a principios de diciembre los internos "iniciaron de una manera pacífica una huelga de hambre para protestar por las condiciones del internamiento en cuanto a comida e instalaciones, y la situación personal y familiar de algunos de los internos, y de madrugada, llegaron unidades de intervención policial, siendo obligados los internos a bajar con los brazos en alto al patio, bajo la lluvia, donde permanecieron durante aproximadamente hora y media y siendo golpeados algunos de ellos cuando no podían mantenerlos en alto".

En la denuncia se relata cómo otro interno fue golpeado después de haberse quejado de las molestias ocasionadas por el servicio de limpieza del CIE y otro, por el altercado que se originó tras insistir en quedarse en una zona donde no le molestara el tabaco.

A nivel general, el colectivo lamenta que por la noche "los internos son encerrados en las celdas colectivas a las 23.30 horas y hasta las 8.30 horas, de manera que los seis internos de cada celda se ven obligados a miccionar en botellas o en el único lavabo que tienen para lavarse las manos o la cara", que enfermos graves no reciben asistencia médica especializada, que les despojan de sus objetos personales, como teléfonos móviles o mantas y que en ocasiones no hay agua caliente, han asegurado.

Paralelamente, critican que las visitas se realizan "sin que se garantice la intimidad, sin contacto físico y con dificultades para el contacto visual" y que los internos desconocen la identidad y el contacto con el abogado del turno de oficio que les asiste en el procedimiento de expulsión.

En la denuncia, se suplica al juzgado que realice las funciones de control que estime oportunas, incluso la visita al centro sin previo aviso, y que se aporten a las diligencias las grabaciones de las cámaras de vigilancia del centro en los días en que ocurrieron los hechos descritos, entre otras cuestiones.

REUNION CON BOTELLA

La organización ha reclamado a la nueva delegada del Gobierno, Ana Botella, que acceda a una reunión "para encarar la situación" y autorice la entrada de estas organizaciones a Zapadores. Precisamente han convocado una concentración para el viernes 21 de enero a las 19.30 horas ante la sede de Delegación.

La denuncia ha sido remitida al Síndic de Greuges y a la Defensora del Pueblo y la organización ha reclamado mantener una reunión con la Comisión de Derechos Humanos de las Corts Valencianes para "pedirles apoyo en la investigación y la depuración de responsabilidades jurídicas y políticas".