Cultura-Russafa Escènica fusiona arte y teatro en un nuevo festival que experimenta con propuestas "poco convencionales"

Presentación Russafa Escènica 2011
EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 31 marzo 2011 17:46

Cornelles lamenta que se utilice la crisis como "excusa" para "no hacer nada" en las artes escénicas

VALENCIA, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -

El barrio de Russafa se convertirá del 5 al 10 de abril en un "germen" de cultura donde las artes plásticas se fusionarán con el teatro para dar lugar a la primera edición del festival Russafa Escènica, un certamen que nace con la intención de "reivindicar que en Valencia hay muchas formas de hacer y de entender el teatro".

Unidas por una generación y el deseo de "experimentar" y "contar" historias, seis jóvenes compañías teatrales valencianas transformarán los talleres y las galerías de arte del barrio valenciano en improvisados escenarios donde "recrear obras de arte escénicas", en su mayoría propuestas inéditas y "poco convencionales" que se podrán ver por primera vez en este festival.

Siete espectáculos, --seis de la programación oficial y uno de producción propia--, y toda una serie de actividades paralelas que incluyen tres exposiciones, un taller de marionetas, charlas, ponencias y hasta un encuentro entre espectadores y compañías, componen este festival que quiere "demostrar que cuando se quieren hacer cosas se pueden hacer cosas", sin que la crisis sea una "excusa".

Así han presentado este jueves el certamen el director artístico de Russafa Escència, Jerónimo Cornelles, su coordinadora Antonella Melle, la responsable de las actividades paralelas Sandra Gómez, la coordinadora de la muestra 'La ciudad que habito' Silvia Valero y el dramaturgo y socio de la Sala Ruzafa, Chema Cardeña, que han querido agradecer la implicación de las entidades y locales de barrio para llevar adelante esta "aventura experimental" que confían que pueda tener su continuidad en futuras ediciones.

La programación incluye un total de siete montajes cuyas entradas ya están a la venta en el Estudio de diseño TRENTATRES, situado en la calle Sueca, 33, y a un precio de 6 euros los montajes de la programación oficial y a 3 euros la producción propia, precios que subirán al comenzar el festival a 7 y 5 euros, respectivamente.

Dentro de la programación oficial 'Tragedia de los comunes' presenta un juego de roles reflexionará sobre las dinámicas de grupo y los intereses personales en la Casa Particular; 'Pájaros azules' expondrá a modo de conferencia el caso dos mujeres afganas que intentan escapar a Pakistán en el Estudio de Anna Sanchis; 'Expuestos' se adentra en la inspiración de una artista que expone su esencia y desnudez en Estudio Color Elefante; 'Niño vestido muerto vestido de payaso' pondrá en común a diversos personajes en la Arquitectura Ruzafa; 'Ética, tattoos i saldos' una artista reflexionará sobre la ética al tiempo que se tatuará en Sproting Club Russafa; y 'No se está mal en el paraíso' descubrirá el erotismo femenino en Estudio Ana Karina.

Junto a estos espectáculos, Russafa Escènica ha querido presentar una propuesta propia 'La ciudad que habito', en la que diez artistas crearán una pieza teatral a modo de "cuadro vivo" en la Sala Russafa. Al entrar se les dará un mapa para recorrer los cuadros que representarán los artistas a lo largo de la Sala.

Cada uno "expresará como metáfora lo que le inspiera la ciudad que vivimos", ha explicado Cardeña. En su opinión, "el teatro siempre ha de tener reflexión" y "aquí cada uno concibe su ciudad desde visiones diferentes".

FESTIVAL "COMPLEMENTARIO"

En este sentido, Cardeña ha puesto de manifiesto que Valencia "siempre ha vivido el teatro y en tiempos difíciles hay que reivindicarlo áun más, y que cada uno haga sus deberes", ha sugerido.

En esta línea, Cornelles ha manifestado que esperan que este festival pueda contar con el "apoyo" de las instituciones públicas, ya que a su jucio, es "hay que invertir" en la cultura. Según ha criticado, "con la excusa de la crisis no se hace nada", pero este nuevo festival "demuestra que cuando se quieren hacer cosas se pueden hacer".

Con nuevas formas de expresión quizá menos convencionales, Russafa Escènica "no es un festival alternativo porque no hay nada con lo que alternar" sino que se trata de un certamen "complementario a la política cultural de la ciudad", ha querido dejar claro Cornelles.