VALENCIA 22 May. (EUROPA PRESS) -
La Plaza del Ayuntamiento de Valencia ha reunido a más de 2.000 personas durante este domingo con motivo de la celebración del Día Mundial del Comercio Justo. El objetivo principal de este evento ha sido reivindicar unas relaciones comerciales "más justas" entre los países del Norte y el Sur y "visibilizar el Comercio Justo como herramienta de desarrollo de los países empobrecidos".
Así, esta celebración ha acogido desde las 11.00 horas de la mañana puestos informativos, de venta y degustación de productos de Comercio Justo y economía solidaria. Además de contar con los conciertos de Eva Dénia, El Cifu y Feliu Ventura, según ha informado la Coordinadora Valenciana de ONGD en un comunicado.
Además, durante todo el día, se han realizado talleres, animación, conciertos para el público familiar con las actuaciones de Kanijo Circus y Spinish, la batucada Borumbaia junto a Asprona Timbals, la Jove Muixeranga de València, Clan de Bichos, Colorín Colorado y cuenta cuentos a cargo de la EMT.
Bajo el lema #SomComerçJust, este evento ha contado con la participación de las organizaciones Setem PV, Cáritas, Oxfam Intermón, La Tenda de Tot el Món, Ecosol, Petjades y Solidaridad Internacional PV y el apoyo de la Generalitat Valenciana, el Ayuntamiento de Valencia y la EMT.
CONSUMO RESPONSABLE Y COMPRA PÚBLICA ÉTICA
Las celebraciones por el Día del Comercio Justo se han extendido durante el mes de mayo por toda la Comunitat Valenciana con jornadas temáticas en Alicante, Castellón, Puerto de Sagunto, Algemesí, Orihuela, Elda y las universidades valencianas, entre otras localidades y espacios.
El objetivo principal de estas jornadas es el de "sensibilizar sobre un consumo responsable entre la población y las instituciones" que "favorezca un sistema comercial más justo para las personas productoras en todo el mundo".
En este sentido, la portavoz de la Coordinadora Valenciana de ONGD, Cristina Ramón, ha asegurado que el comercio justo es "una herramienta de lucha contra la pobreza" y ha animado a la ciudadanía "a ser una consumidora consciente y crítica", a ejercer sus "derechos de decidir sobre sus compras" y a exigir "a las administraciones valencianas una compra pública ética".