CASTELLÓN 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
Apnal-Ecologista en Acción y Gecen han considerado este martes "muy grave" el incendio que ha sufrido este fin de semana la marjal de Peñíscola (Castellón), y han asegurado que es "la peor afección a un humedal de la provincia tras los incendios intencionados del Prat de Cabanes-Torreblanca".
Según han explicado los ecologistas en un comunicado, "se ha quemado entre el 40 y 50 por ciento del corazón del Lugar de Interés Comunitario-LIC y zona húmeda catalogada y protegida, hábitat singular que acoge la mayor población a nivel mundial del endémico samaruc y una de las más importantes de fartet, dos especies de peces catalogadas en peligro de extinción tanto en la Comunidad Valenciana como en el resto de España, y que se encuentran incluidas en el Catálogo Español de Especies Amenazadas (RD 139/2011)".
"Además existen poblaciones importantes de galápago europeo y leproso, siendo también un lugar de importancia para una variada avifauna, con dormideros de ardeidas, así como una variada población de paseriformes protegidos", han añadido.
En opinión de estas asociaciones, "todas estas especies se habrán visto afectadas gravemente por el incendio, tanto directa --muerte por afección directa del fuego-- como indirectamente --destrucción del hábitat que les permitía realizar sus ciclos vitales--".
Los ecologistas han denunciado que "no es la primera vez que el marjal sufre un incendio, y los anteriores han sido intencionados en su gran mayoría", por lo que teme que éste "también lo sea". "Atentar contra la biodiversidad y los espacios naturales protegidos sale gratis casi siempre, por lo que pedimos que se investigue y se depuren las oportunas responsabilidades, que se acabe con la impunidad de quienes atentan contra el patrimonio natural de todos", han indicado.
Según los ecologistas, "este espacio natural protegido siempre ha sido visto, por algunos, como un terreno perdido para el urbanismo y las infraestructuras, y el Ayuntamiento de Peñíscola y las administraciones competentes no han parado de permitir desecaciones y agresiones desde los años 60".
"Para colmo está el último proyecto de 'Recuperación, repoblación y puesta en valor del frente este de la Marjal de Peñíscola', que crea nuevas agresiones en la zona sur con pasarelas y caminos por el humedal que generarán más problemas como basuras, incendios, facilidad de acceso, afecciones a las especies en época de cría, y peligrosidad", han advertido.
Los grupos ecologistas se preguntan "hasta cuándo va a permitir la administración la degradación de la marjal de Peñíscola, si algún día va a actuar o si va a dejar alterar y morir lentamente a este humedal de excepcional valor".