MADRID, 21 Nov. (EUROPA PRESS)
La desesperada lucha de Sandra Bullock por sobrevivir sola en mitad del espacio vivida desde la Tierra. Esto es lo que nos ofrece Aningaaq, una suerte de spin-off de Gravity. Un corto de siete minutos firmado por el hijo del director, Jonás Cuarón.
Ambientado en Groenlandia y con la voz de Bullock, el cortometraje nos lleva hasta un momento clave de la cinta dirigida por Alfonso Cuarón. ((ATENCIÓN SPOILERS)) El personaje de Sandra Bullock, la doctora Ryan Stone, está atrapada dentro de una cápsula espacial rusa y sus esperanzas de salir con vida son mínimas.
Totalmente desesperada pide ayuda por radio y unos segundos después encuentra respuesta. Se trata de la voz lejana de un hombre que habla un idioma extranjero y con el que a duras penas logra entenderse. Pero durante esos segundos en los que logra salir de su terrible aislamiento, la doctora Stone escucha ladrar a un perro y llorar a un bebé.
Y ahora en el cortometraje vemos que había al otro lado, un pescador que también se enfrenta a los elementos en uno de los lugares más recónditos y áridos del planeta. Separados por cientos de kilómetros de altura Aningaaq y Ryan conectan y con ellos lo hacen dos historias gemelas sobre el afán de supervivencia del ser humano.
Esta pieza dirigida por Jonás Cuarón, que firma el guión de Gravity junto a su padre, fue financiada por Warner Home Video (tuvo un presupuesto de unos 100.000 dólares) e inicialmente estaba pensada como una extra para la edición Blu-ray de la película. Pero su gran acogida en las proyecciones de festivales como los de Venecia y Telluride han hecho que Aningaaq tenga vida propia y ahora Warner la ha presentado como su apuesta para el mejor cortometraje en los Oscar.
Y podría hacer historia en los Premios de la Academia como el primer extra y spin-off de corto extraído de una película que está nominado junto a la cinta original en el mismo año. Una de las que seguro votará por Aningaaq será la propia Sandra Bullock que definió este cortometraje como "una pieza sobre la soledad absolutamente bella". "Me pone la piel de gallina tan solo pensar en ello", setencia.
Foto: WARNER BROS. PICTURES