MADRID, 3 Jul. (EDIZIONES) -
25 años han pasado desde el estreno de Terminator 2: El juicio final. La cinta que de nuevo dirigió el creador de la saga, James Cameron, ha pasado a la historia no solo como uno de los grandes títulos de ciencia ficción, sino también como una de las contadas secuelas que superaron a la cinta original.
Protagonizada por un entonces hipertrofiado Arnold Schwarzenegger, la cinta de Cameron marcó a toda una generación que, soñando con ser el T-800, terminó por tener pesadillas con el brutal T-1000 de metal líquido encarnado por Robert Patrick.
Estrenada en 1991, Terminator 2 fue el punto de inflexión para todas aquellas películas posteriores que tomaron de ella el ejemplo de cómo había que rodar escenas de acción con CGI. Terminator 2 tuvo un gran éxito entre crítica y público: amasó más de 519 millones en la taquilla mundial y gozó de grandes valoraciones.
Con motivo de su 25º aniversario, en Europa Press repasamos 10 cosas que (quizá) no sabías sobre este clásico básico del cine de acción de los noventa.
1. JAMES CAMERON VENDIÓ SUS DERECHOS POR UN DÓLAR
A pesar de haber creado al icónico personaje y la historia de los Connor, Cameron no se pensó dos veces vender los derechos de la saga -exceptuando la primera entrega- a Carolco Pictures (productora de la cinta) por tan sólo un dólar. Una decisión que, años más tarde y según palabras del propio cineasta, "habría cambiado de tener una máquina del tiempo".
2. LA CONEXIÓN CON RODNEY KING
El rodaje de la escena en la que The Terminator aparece montado en su fiel Harley Davidson se produjo en el mismo lugar y a la misma hora que Rodney King sufría un violento ataque racista que casi acaba con su vida. De hecho, el viandante que grabó el vídeo que después serviría de prueba para el juicio, afirmó días más tarde que conservaba dos trozos de metal de los disparos producidos en el rodaje, cerca del Valle de San Fernando.
3. PHOTOSHOP COMO FORMA DE VIDA
El CGI de los 90 estaba realizado por la primera versión de Photoshop. Precisamente, Cameron ordenó emplear el entonces emergente software para recrear la escena en la que el T-1000 atravesaba una pared de fuego. Para ello se emplearon varios elementos de Jurassic Park. De hecho, en una de las secuencias que presenta a Cyberdyne Systems aparece una dinosaurio inflable que cuelga del techo.
4. GOLPEADA POR LA CENSURA BRITÁNICA
Una de las escenas más discutidas por la British Board of Film Classification (BBFC) fue en la que Sarah Connor aparece en el psiquiátrico abriendo una de las puertas con una ganzúa hecha de papel. La organización consideraba que su proyección era peligrosa porque "podía darle ideas a los delincuentes".
5. LA DECEPCIÓN DE SCHWARZENEGGER
Una vez terminado el rodaje de la película, Cameron viajó hasta el Festival de Cannes para presentarla. Fue allí donde aseguró que la primera vez que habló con Schwarzenegger sobre el T-800 y su capacidad para matar a cualquiera, el actor se mostró reticente porque eso "no podía ser verdad".
6. RODAJE ACCIDENTADO
Y la peor parada fue Linda Hamilton. La actriz se olvidó de volver a ponerse el tapón en la oreja izquierda antes de que Cameron diese la orden para rodar la escena en la que Sarah Connor escapa del psiquiátrico mientras The Terminator le presta su ayuda. Cuando Schwarzenegger disparó la escopeta en la secuencia, el fuerte sonido desprendido por el arma provocó que la intérprete perdiese la capacidad auditiva del oído.
7. UN CANTANTE ENCARNANDO AL T-1000
Antes de que Cameron eligiese a Robert Patrick para dar vida al temible T-1000, hubo otros muchos que estuvieron a punto de conseguir el papel. Uno de ellos fue el cantante Billy Idol, en el que Cameron se había basado para diseñar los primeros trazos del personaje. Sin embargo, Idol tuvo un accidente de moto y, en ese momento, se cerró la puerta de los Connor.
8. EL FINAL 'IN EXTREMIS'
El final original estaba protagonizado por una Sarah Connor mucho más vieja, jugando con su hijo John en un escenario donde predominaba la paz. Sin embargo, esta secuencia fue cortada ya que la productora consideraba que arruinaría toda la película. De hecho, Cameron tuvo que reescribir el final cuando sólo quedaba un mes para el estreno.
9. LA PELÍCULA MÁS CARA DE LA HISTORIA
Con un presupuesto de 102 millones de dólares, Terminator 2 tuvo el privilegio de ser la película más cara de la historia hasta que Cameron decidió quitarle ese puesto, primero con Titanic en 1997, y después con Avatar en 2009.
10. UNA IMAGEN VALE MÁS QUE MIL SONIDOS
Las épicas imágenes de la secuela nada tienen que ver con el sonido que las acompaña. Y es que, frente a los distintos softwares y herramientas empleadas por Cameron para realizar una película lo más completa posible a nivel fotográfico, los técnicos de sonido tenían que exprimir su imaginación para producir determinados sonidos con el menor -y a veces peor- material.