MADRID 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
"Ahora que tengo más de cincuenta mil followers y me he tomado cuatro vinos podré decir mi mensaje: ¡El holocausto fue un montaje!". Con este 'tuit' Nacho Vigalondo ha encendido la red. Una broma que en pocos días ha desatado un tsunami mediático
Con permiso de Bisbal y su particular preocupación por la soledad de las pirámides egipcias, el otro nombre del momento en Twitter es Nacho Vigalondo. El director de 'Los Cronocrímenes' ha desatatado una tremenda polvareda con una broma sobre el Holocausto.
Un comentario que, según apunta hoy en su blog de El Pais, hizo "en circunstancias más festivas que otra cosa" para celebrar que había conseguido la redonda cifra de 50.000 followers. Pero "gag" sobre el Holocausto no fue tomado a broma por muchos acaparó rápidamente la atención en la red, dejando en un segundo plano su otra afirmación: "La bala mágica que mató a Kennedy todavía no ha aterrizado".
Al comprobar las airadas reacciones de algunos de sus seguidores, que no recibieron de buen grado su broma y, entre algún que otro improperio, le reprochaban al director su desafortunado sentido del humor y anunciaban que dejaban de ser sus followers, Vigalondo siguió estirando la broma del Holocausto.
"¿CÓMO SE LLAMABA LA PELÍCULA ESA DE SPIELBERG?"
No solo dio cabida en su Twitter a todos estos mensajes de desaprobación, sino que siguió azuzando el fuego con otras píldoras de humor negro: "Si tutiteas una broma a costa del Holocausto perderás un porrón de followers sin sentido del humor. Lo recomiendo como Solución Final". "¿Cómo se llamaba la película esa de Spielberg? Ah, sí.. Parque Judaico". "¿Cómo se llamaba la película esa de Spielberg? Ah, sí.. A todo gas". "Decoraban las paredes con cuadros de Degas". "A este paso me van a aplicar la 'Ley Schindler".
Esta colección de Una polémica que, aun a riesgo de reavivar, Vigalondo prefiere retomar de su puño y letra ante "la necesidad de aclarar algunos hechos".
"No es la primera vez que abuso del humor negro (de hecho, las he soltado más gordas en el pasado), no es la primera vez que se genera tensión en mi cuenta, no es la primera vez que recibo insultos, no es la primera vez que, por el motivo que sea, se suman mil followers nuevos en un día. ¿Por qué el revuelo mediático ha sido considerablemente mayor esta vez?", se pregunta Vigalondo en su extenso post.
UNA "VÍCTIMA"
Un texto en el que se define como "víctima" de la "volátil confluencia de redes sociales y periodismo" y en el que en varias ocasiones defiende la imposibilidad de "guionizar" su cuenta de Twitter, "Tener un twitter autoconsciente es prácticamente imposible. Como la vida", afirma Vigalondo.
El director termina pidiendo disculpas a "todos los que se haya podido ofender con mis juegos de palabras y mis chistes" a los que también les da un consejo: "Les pido disculpas pero añado, no como arrogancia, sino como una rendida advertencia de mis limitaciones, de mis vaivenes, de lo poco que puedo prometer, de lo poco que puedo guionizar... ¡No entréis en mi twitter nunca más!".