BARCELONA 2 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Consejo de Dirección de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), Eduardo Bautista, atribuye la "mala imagen" de la entidad a la remuneración por copia privada que promulgaron, momento en que "la cosa se fastidia" porque las asociaciones de internautas emprendieron un "ataque frontal".
"Pero no estamos para ser simpáticos, estamos para ser eficientes", remacha Bautista, que asume que "alguna culpa" tiene la SGAE -"pero no la mayor"- de la imagen negativa que la sociedad se ha creado de ella, y clama porque la clase política haya "sucumbido extrañamente al clamor" de la democracia digital.
Bautista, que compareció esta semana en rueda de prensa en la SGAE de Barcelona para presentar el balance de la gestión de la entidad en 2008, reconoció que tienen que esforzarse en proyectar su trabajo "con un mejor gesto" para que la sociedad deje de verles como los malos de la película, aunque, según el directivo, no se les puede "acusar de falta de cordialidad".
A instancias del ex ministro de Cultura, César Antonio Molina -el primero que explicitó la necesidad de defender a los autores, según Bautista-, la SGAE se sometió a una auditoría de calidad de gestión, que ejerció durante medio año la Agencia Estatal de Evaluación de las Políticas Públicas y la Calidad de los Servicios (AEVAL).
El informe resultante señala "aspectos mejorables" de la SGAE, algunos de los cuales son "asumibles", dijo Bautista sin especificar a cuáles se refería. "Siempre hemos dicho que nuestro sistema era mejorable", indicó Bautista, quien avanzó que la SGAE comparará tarifas con otras sociedades de gestión europeas para demostrar que está "en el paradigma usual".
"Espero que defienda la creatividad como el ministro Molina", deseó Bautista sobre la nueva ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, de quien destacó que le resulta "prudente, estudiosa e inteligente".
MÁS MUJERES CREADORAS
Si el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se esmeró por conseguir la paridad en su gobierno, la SGAE la tiene en su plantilla -en el conjunto de sus centros de trabajo hay un 51 por ciento de mujeres y un 49 por ciento de hombres (el total son 473 trabajadores)- pero no entre sus socios.
La cantidad de autoras asociadas es "minoritaria pero creciente", aseguró la SGAE, ya que en 2008 se dieron de alta 601 mujeres, la quinta parte de los nuevos socios. El incremento de socios en 2008 (3.703, de las cuales 702 se afiliaron en Cataluña) no fue correlativo a los ingresos sociales que tuvo la entidad, ya que después de cuatro años de crecimiento sostenido, en 2008 las ganancias de la Sgae se desplomaron: en 2007 ingresaron 377 millones de euros y en 2008, 334.
El reparto que hizo la SGAE entre sus socios, administrados y sociedades extranjeras fue de 363 millones de euros, 32 millones menos que el año anterior (en 2007 se repartieron 395, culminando una progresión ascendente y continua desde 2004, cuando se repartieron 295).
Bautista destacó que el reparto económico entre los socios sólo disminuyó un 8 por ciento en 2008 respecto a 2007, menos de lo que cayó el mercado (un 11,5), por lo que se congratuló por haber conseguido un 'down sizing' en la entidad, es decir, disminuir el funcionamiento a un tamaño sostenible para afrontar la crisis.