MADRID 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
El indonesio Andrea Hirata decidió un día rendir homenaje a sus profesores y sus compañeros de escuela con un libro. Poco tiempo después llegó a las manos de un editor sin que él mismo fuera consciente y se convirtió en un éxito de ventas en todo el mundo. Su historia se llamó 'La tropa del arco iris' y ahora llega a España de manos de Temas de Hoy.
Esta novela es "un viaje a un lugar único que no aparece en el mapa", ha manifestado el escritor este viernes, en declaraciones a Europa Press. En ella, diez estudiantes y dos profesores cumplen el sueño de luchar por la educación, la dignidad y la vida.
Su escuela se encontraba en una de las comunidades más pobres de Indonesia y nadie se preocupaba por ella ni pagaba a su profesora. Sin embargo, y según queda reflejado en estas páginas, se demuestra que "se puede reír y sonreír a pesar de la miseria".
Su mayor lección la aprendió en la escuela y se resume en una frase: "Dar tanto como puedas, en vez de coger tanto como puedas". El significado de la palabra "sacrificio" fue muy profundo en esta etapa, una forma de "descubrir el amor de la forma más bonita", subraya el autor de este libro.
LUCHAR POR LA EDUCACIÓN
La "tropa del arcoíris", como les llamó su profesora a sus alumnos, estaba compuesta por diez miembros: Ikal, jugador de bádminton y aspirante a escritor; Samson, un forzudo crédulo; Harun, un síndrome de Down obsesionado con la belleza del número tres; Kiong, cuya cabeza recuerda a la del monstruo de Frankenstein.
Además, también formaban parte Sahara, la única niña; Trapani, guapo y precoz; Syahdan, pequeñito y comilón; Kucai, un niño presuntuoso que desea convertirse en político; Mahan, un auténtico artista atraído poderosamente por el mundo de lo oculto; y el increíble Linsang, genio matemático que sortea cocodrilos cada mañana para poder llegar a la escuela.
Cuando llega el primer día de clase en la isla indonesia de Belitong, los maestros Bu Mus y Park Arfa se enfrentan a su mayor miedo: que la escuela no alcance el número de alumnos requerido para mantener sus puertas abiertas.
Además, las motivaciones de conseguir que los niños sin recursos acudan a sus clases son muy escasas, ya que es más fácil buscar un trabajo recogiendo pimienta que pasar hambre y frío en un aula donde ni siquiera hay una pizarra y en la que, en los días de lluvia, hay que escribir a la vez que se sostiene un paraguas.
"Nuestros profesores nos animaron a luchar por la educación. Generación tras generación, los campesinos no creían en ella y se pensaba que era algo inútil", explica Hirata, para quien este libro es una "inspiración".
"Es una historia triste, llorarás y reirás a la vez, pero te sentirás bien y querrás creer", ha dicho el autor de 'La tribu del arcoíris'.