MADRID, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
El escritor Carlos Mayoral vuelca sus obsesiones literarias en 'Empiezo a creer que es mentira' (Círculo de Tiza), una compilación de artículos en las que el autor repasa los textos que han guiado sus lecturas, con especial atención a la generación del 98, a la que considera necesaria en estos días.
"Es una generación que me vuelve loco, de hecho, los dos pilares en los que me apoyo en muchas ocasiones son, por un lado Machado y por el otro Unamuno, dependiendo del tono que le quiera dar al texto. Y creo que esta generación como tal, más allá de gustos personales, es ahora absolutamente necesaria en este país", ha defendido en una entrevista con Europa Press el autor.
Así, Mayoral ha recordado que esta generación está asociada al 'desastre del 98', cuando España "cae en barrena" y, a partir de ahí, construye su literatura. "La obra de Unamuno gira en torno a los problemas de España, por eso creo que hay que acudir a él de nuevo: al final, la Historia es cíclica y siempre son las mismas preguntas", ha apuntado.
'Empiezo a creer que es mentira' no solo centra su mirada en este periodo, sino que también asoma a otros temas como la muerte y la escritura. El objetivo del libro fue desde un principio el de "huir del canon tradicional" para acercarse a los clásicos literarios "con una visión moderna".
"Me atrae mucho la relación de la muerte con el arte en general, por ejemplo los atormentados. Al final la muerte es un telón de fondo, algo desconocido y metafísico, y todo lo que se pueda decir de ella nunca es verdad ni mentira", ha apuntado.
Además, la asociación de muerte y terror también encuentra espacio en estas páginas, con nombres como los de Edgar Allan Poe o Lovecraft, aunque el escritor no se reconoce especial lector de este género. "El miedo es un sentimiento muy personal, que despierta resortes muy personales, en especial a través de la literatura", ha indicado.
MUJERES ESCRITORAS
Mayoral, quien se reconoce "lector absoluto" de Emilia Pardo Bazán a pesar de "no recibir la atención que se le da por ejemplo a Clarín o a Galdós", también dedica varios artículos a reivindicar a escritoras en muchos casos olvidadas, como es el caso de Gertrudis Gómez de Avellaneda. "Hace falta una labor de investigación en el pasado para igualar a hombres y mujeres en la literatura. Me parece un crimen que grandes autoras todavía no tengan voz como sí ocurre con los autores", ha criticado.
Por las páginas de esta obra también sobrevuela la idea de verdad y mentira --el título se inspira en un verso de Leopoldo María Panero, pero también en una cita de Neruda, quien asegurói que el día que llegase la muerte 'no iba a encontrar una sola verdad'--. Para Mayoral, la pregunta de '¿qué es verdad?' resulta "fascinante, porque nunca se ha diferenciado bien de la mentira".
LAS FALTAS DE ORTOGRAFÍA
Mayoral, conocido en Twitter por el pseudónimo 'La voz de Larra', ha defendido a través de esta red social un correcto uso de la ortografía. "Es verdad que es un papel que yo mismo he contribuido a potenciar, pero lo cierto es que la lengua es de cada uno y así la utiliza como quiere", ha señalado.
No obstante, ha reiterado la importancia del buen uso lingüístico para determinadas profesiones, en especial el periodismo. "A mi me molestan los narradores de fútbol cometiendo tropelías gramaticales. Creo que utilizar bien estas reglas te dan una entereza personal y profesional de la que careces si desconoces esto", ha concluido.