MADRID, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
Se desconoce si Iron Maiden llegaron hasta el aeródromo de Getafe pilotados en su avión privado por el mismísimo Bruce Dickinson, pero sí se puede confirmar que en el Cerro de los Ángeles no faltaba absolutamente nadie: 40.118 personas en total, según la organización, nada menos que 10.000 más que en la jornada del viernes.
La segunda jornada del festival Sonisphere comenzó a las tres de la tarde con Hammerfall, y siguió con Mastodon, Apocalyptica y Dream Theater. Ya en ese punto el recinto comenzaba a ser un lugar ciertamente incómodo para el público por culpa del calor, la polvareda y la masificación. Esto último se acentuó en torno a las 21 horas, poco antes de la hora prevista de inicio de la actuación de Iron Maiden.
Auténticos líderes del 'heavy metal', los británicos llegaron a Getafe con toda su galáctica parafernalia y no defraudaron al gentío, que desde la primera hasta la última fila tocó con gozo todo tipo de guitarras imaginarias, y que recibió con verdadero alboroto los clásicos, mientras aprovechaba otros temas más recientes para recargar energías.
Clásicos como '2 Minutes to Midnight', 'The Trooper', 'Blood Brothers', 'Wicker Man', 'Fear of the Dark', 'Iron Maiden', 'The Number of the Beast', 'Hallowed By The Name' y 'Running Free'. Algunos no perdonarán que se dejara en el tintero 'Run to the Hills', pero no, no la tocaron.
Dos horas de actuación sirvieron para contentar al respetable, que comenzó a abandonar en riadas el recinto a su término, haciendo del lugar un sitio más cómodo para los que se quedaban a ver a Twisted Sister, quienes hicieron una actuación impecable, divertida y disfrutable, recuperando 'We're Not Gona Take It' ('Huevos con Aceite' en su hilarante versión española, cantada incluso por el propio Dee Snider entre risas), 'I Wanna Rock' o 'The Kids Are Back'.
Tras ellos fue turno para los veteranos Uriah Heep, encargados de sustituir a Alice Cooper en el cartel. Lacuna Coil fueron los encargados de dar carpetazo a la edición 2011 del Sonisphere, que cierra con los mejores números de sus tres ediciones al conseguir una asistencia global de 70.540 personas repartidas en sus dos jornadas (frente a las 43.102 del año pasado).