MADRID, 28 May. (EUROPA PRESS) - El cantante Quique González está inmerso en su gira Carta Blanca, en la que se enfrenta sin repertorio y acompañado solo por la guitarra y el piano a un público que le sugiere las canciones. En unos conciertos que le están sirviendo para "reencontrarse con sus viejas canciones" y sentir "ese riesgo" que le da "la libertad para cambiar las cosas sobre la marcha", algo que está siendo muy "bonito". En una entrevista con Europa Press, el cantante, que toca jueves y viernes con entradas agotadas en la Sala Galileo de Madrid, ha explicado que esta experiencia está siendo "interesante" porque está "aprendiendo cosas" y, el hecho de tener ese riesgo de no tener repertorio y tocar solo, le hace tener que "improvisar y cambiar cosas cuando llegan y estimular un poco los recuerdos y la memoria". Además, dice le ha servido para reencontrarse y reconciliarse con su repertorio antiguo. "Tengo la sensación de que la gente lo está disfrutando, hay una cercanía en el público y en la interacción, puesto que las canciones del listado se van haciendo mientras lo va pidiendo la gente. Y, ese punto de riesgo, de libertad de dedicarle la canción a la persona que te lo acaba de pedir está siendo bonito para mi y para ellos", ha asegurado. Esta idea de hacer un concierto más íntimo y cercano al público surgió tras un concierto que realizó Quique González en Málaga en el que se reencontró con el público en acústico, pero este artista viene de hacer tres giras seguidas desde que publicó Delantera Mítica en 2013, a lo que siguió otra gira en la que se unió a José Ignacio Lapido. Esta unión con Lapido fue una experiencia que ha calificado como "la más interesante y más bonita" desde que está en la música por el hecho de formar parte de un grupo. "En ese sentido, si le añades que lo he hecho con el tipo con el que más me hubiera gustado tocar, un artista que admiro tanto como Lapido", ha explicado a la par que ha confesado ser "una experiencia maravillosa". Repasando su carrera cree que el disco de Avería y Redención quizás lo hubiera hecho de otra manera aunque con la misma gente, porque considera que en ese momento no estaba preparado para "producir", así que lo hubiera hecho "añadiendo la figura de productor para encarar todo aquello". Algo que consiguió en su disco posterior Daiquiri Blues, grabado con Brad Jones en Nashville, donde aprendió de los "musicazos" con los que tocó y de "su forma de vivir la música". El último disco Delantera Mítica trata el tema de la amistad a lo largo de tiempo y "cómo influye la traición y la lealtad y la lejanía y la cercanía y cómo se puede romper y arreglar", ha recalcado. "El disco es igual de romántico que el resto pero tiene menos que ver con la relación de pareja y más con la amistad", ha confesado el artista. Como próximos proyectos está preparando su nuevo disco mientras está de gira con 'Carta blanca', que terminará en julio de este año momento en el que comenzará a grabar su próximo trabajo que saldrá el año que viene. "He enlazado tres giras seguidas desde 'Delantera mítica' pero me ha dado tiempo a hacer canciones y estoy ilusionado otra vez con hacer el siguiente disco, se trata de seguir, de avanzar y mientras tenga canciones, me gusta este oficio", ha concluido. En cuanto al cambio político que se puede producir tras las elecciones municipales y autonómicas del 24 de mayo ha asegurado que le parece que es uno de "los momentos más bonitos que hemos vivido en la historia de la democracia tanto en Barcelona como en Madrid". Y ha calificado a Manuela Carmena y a Ada Colau como "dos supermujeres con un comportamiento intachable y una lucha ejemplar toda su vida". "Que estas dos mujeres hayan logrado organizar más que probablemente las alcaldías de las dos ciudades más importantes de España es una maravilla. Estoy absolutamente enamorado de Manuela Carmena y va hacer mucho bien a una ciudad como Madrid que ha vivido un saqueo tremendo durante 20 años", ha considerado. Asimismo, ha afirmado que simplemente con comparar la trayectoria de Carmena y Aguirre "fuera de consideraciones políticas", si fuera la candidata a la comunidad de vecinos no cree que hubiera tantas dudas de una elección u otra. "Nos quedaríamos con Manuela", ha sentenciado. Con respecto a la subida del IVA al 21% dice que es algo que se ha "cargado un montón de puestos de trabajo y ha hecho que la industria cultural esté en un momento verdaderamente dramático". Y es que ha considerado que esta subida ha hecho que pierdan el trabajo no solo cantantes o actores, sino también técnicos de iluminación, directores de fotografía entre otros muchos y es "difícil no verlo". "Todos sabemos que el PP siempre ha visto la cultura como un enemigo y el PSOE la ha visto como un aliado, pero solo para el periodo electoral luego les han dejado tirados", ha indicado, por lo que espera que para "la próxima opción que venga la cultura forme parte del tejido social".