ROMA, 2 May. (EUROPA PRESS) -
El español Rafa Nadal y el serbio Novak Djokovic medirán fuerzas de nuevo en la final del Masters 1000 de Roma, cuarto de la temporada, después de que hace dos semanas se disputasen el título en Montecarlo.
Nadal sumó la victoria número 29 de manera consecutiva sobre tierra batida y además ante González dejó patente, una vez más, su enorme capacidad sobre la arcilla roja, incluso cuando no está tan fino.
El balear cedió un servicio en blanco en la primera manga, pero eso no fue obstáculo porque sumó hasta tres saques al resto para doblegar al chileno González por 6-3. El sudamericano arriesgó con su enorme derecha, pero Nadal aplacó su fuerza con el tenis-control del que hace gala en ocasiones.
En el segundo set, Nadal encarriló el triunfo con un 3-0 de inicio. Luego ya no habría historia porque González no pudo poner en aprietos al español. El último reto para Nadal y su cuarto Masters de Roma será Djokovic, quien clamó 'venganza' tras perder en Montecarlo después de que en aquella ocasión le hiciera un set a Nadal y tuviera opciones en el tercero y definitivo.
Previamente Djokovic, tercer jugador mundial, superó en tres sets por 4-6, 6-3 y 6-3 a su predecesor en el ránkig, el suizo Roger Federer. El balcánico, que perdía por 6-4 y 2-1 cuando la lluvia interrumpió el encuentro, mejoró sensiblemente su versión en el regreso a la pista y acabó con un Federer que se agota con el paso del tiempo.
El helvético había rayado a buen nivel en la primera manga, en la que se aprovechó de un fallo de concentración de Djokovic para romperle el servicio y apuntarse el parcial por 6-4. En la segunda manga, el guión parecía incluso mejor para Federer, que rompió de inicio y tuvo una oportunidad de ponerse 3-0 e incluso otra para 4-1.
Pero Djokovic, con grandes golpes de derecha, recuperó el pulso al encuentro y con 4-3 a su favor consiguió el primer 'break' sobre Federer para ajustar el marcador por 6-3. El balcánico también se recompuso cuando cedió su saque con 2-1 en el tercer set.
Federer, que todavía no ha ganado un torneo este año y no juega una final desde que lo hiciera en el Abierto de Australia, no supo aprovechar la ventaja de 3-1 y no volvería a hacer un juego más en Roma. Cinco consecutivos de Djokovic, incluidos tres al resto, le otorgan la posibilidad de revalidar el título la capital italiana.