EDIZIONES, 14 nov.
Esta es la historia de una cámara que promocionan como todo-terreno y demostró que es más resistente de lo que cualquier campaña de marketing pudiera hacer justicia.
Erik Storm, un guía turístico del Parque Nacional de los Volcanes de Hawai, se encontraba en una de esas excursiones por el Kilauea cuando decidió que era una buena idea probar hasta dónde podía llegar su cámara GoPro y la colocó en una grieta para filmar los flujos de lava.
La cámara, obviamente, ilesa no salió. De hecho, Storm la daba por perdida. "Estaba contando una historia cuando la lava fundida engulló por completo mi GoPro (con carcasa puesta) y se incendió", le dijo Storm a PetaPixel. "Utilicé un martillo de roca geológica para sacarlo de la lava y pensé que era una pérdida total".
Fue al llegar a casa cuando el hombre logró sacar la tarjeta SD de dentro de la cámara y vio lo que había grabado. Allí se dio cuenta de que capturó el preciso momento en que la cámara se ve envuelta en lava y saltas las llamas.
Te lo cuentan y no te lo crees. ¡Echa un vistazo al fascinante vídeo a continuación!