La inmobiliaria redujo un 37% su plantilla en 2009 y cerró algunas delegaciones
MADRID, 11 May. (EUROPA PRESS) -
Metrovacesa sopesa realizar una ampliación de capital para canjear deuda por acciones, dentro de la negociación que mantiene con sus bancos para refinanciar el pasivo de 5.786 millones de euros que actualmente soporta la inmobiliaria.
Se trata de unas de las alternativas que la empresa ha planteado a sus entidades acreedoras dentro del proceso de reestructuración de deuda con el que busca "adaptarse desde el punto de vista financiero a la difícil situación que atraviesa el mercado inmobiliario".
Así se establece en la información adicional a su memoria anual de 2009 que Metrovacesa ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El canje de deuda por acciones constituyó una de las principales vías de la refinanciación recientemente cerrada por Colonial, actualmente controlada en un 82% por sus bancos acreedores.
En el caso de Metrovacesa, en caso de recurrir a este intercambio, también supondría ampliar el abanico de entidades financieras accionistas. En la actualidad, ocho bancos y cajas (Santander, Banesto, BBVA, Caja Madrid, Banco Pastor, Banco Sabadell, 'La Caixa' y Barclays) controlan un 77% del capital de la compañía y su gestión.
Además, el HSBC ostenta derechos de voto de acciones de Metrovacesa representativas del 11,21% de su capital social y propiedad de la familia Sanahuja, ex accionista de control de la inmobiliaria.
PLAN DE NEGOCIO.
En su notificación a la CNMV, Metrovacesa indica que trabaja para cerrar "tan pronto como sea posible" la refinanciación y la elaboración de un nuevo plan de negocio, "adaptado a las condiciones de mercado actuales y expectativas futuras".
En tanto, los actuales gestores de la inmobiliaria han avanzado en el último año y medio distintas decisiones, entre las que destacan la selección de los productos inmobiliarios "más adecuados a las actuales circunstancias" y la desinversión "de aquellos que no se consideran óptimos".
En esta política se enmarcan también medidas de reestructuración organizativa, entre las que sobresalen el cierre de delegaciones territoriales "en las que ha finalizado la actividad de la compañía por agotamiento de producción o desinversión", y una reducción de la plantilla del 37%.
Además, la empresa ha "renegociado" distintos compromisos de inversión, para resolver proyectos de inversión "cuyas condiciones originalmente planteadas los hacían inviables".