Economía/Vivienda.- El fin de la deducción por compra obliga a dedicar un 6,3% más del salario al pago del piso

Vivienda
EP
Actualizado: domingo, 23 enero 2011 12:39

MADRID, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -

Las familias con rentas superiores a 24.000 euros que compren una vivienda para uso habitual a partir de este año tendrán que dedicar un 6,3% más de su salario al pago de la hipoteca por la eliminación de la deducción por compra para equiparar la fiscalidad de la propiedad y el alquiler, según datos del Banco de España recogidos por Europa Press.

Con datos correspondientes al cuarto trimestre de 2010, el esfuerzo teórico contando con la deducción alcanzó de media el 26,8% del salario, mientras que, sin el efecto de este beneficio fiscal, este porcentaje se elevó hasta el 33,1%, casi un tercio de las rentas.

Este incremento del coste en el pago de la vivienda será soportado íntegramente por aquellas familias con ingresos superiores a los 24.107,20 euros, para los que la deducción desaparecerá totalmente.

Entre los 17.707,20 y los 24.107,20 euros de base imponible se aplicará una reducción gradual de forma lineal, con lo que el esfuerzo salarial también se incrementará paulatinamente.

Sin embargo, cuando la base imponible sea inferior a los 17.707,20 euros, se mantendrá la deducción en cuota del 15% de las cantidades pagadas en un año, con un límite de 9.040 euros al año.

La limitación de la deducción tiene carácter general, aunque algunas autonomías han decidido mantenerla en su territorio, como Madrid, Navarra y País Vasco, y el cambio no afecta a los contribuyentes que en la actualidad se están aplicando la deducción por vivienda, independientemente de su nivel de renta.

Los cálculos realizados por el Ministerio de Economía y Hacienda señalan que esta modificación fiscal afectará a alrededor de 323.000 contribuyentes.

LAS FAMILIAS GASTAN, EL ESTADO AHORRA.

Pero mientras las familias dedican mayor parte del sueldo a la compra de vivienda, el Estado logrará ahorrar alrededor de 200 millones de euros en 2011, según las previsiones del Gobierno.

Estas modificaciones fiscales van en la línea de orientación de las políticas de vivienda del Gobierno, que persiguen aumentar el peso del mercado del alquiler y equipararlo al de compraventa de viviendas.