MADRID 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
La demanda global de biomasa aumentará a un ritmo anual del 9% hasta 2020, debido a que muchas centrales de carbón quedarán obsoletas al no ajustarse a la legislación medioambiental europea.
Esta conclusión aparece recogida en un informe de la consultora Bain & Company, en el que también se atribuye este crecimiento a que las compañías eléctricas están buscando fórmulas como la cocombustión de carbón y biomasa, o como la transformación sus centrales para sólo generar con esta última.
El uso de la biomasa en la transformación de las plantas de carbón será también un factor determinante para su rentabilidad, debido al aumento del precio del carbón, señala el informe.
Bain & Company también estima que la producción de energía con biomasa será competitiva y no tendrá necesidad de subsidios en muchos países hacia 2020.
El estudio también sostiene que la demanda de aglomerados de madera en Europa alcanzará 29 millones de toneladas en 2020, frente a ocho millones en 2010, pero la mayoría de lo que necesita Europa deberá importarse desde América del Norte, Rusia y Brasil.