MADRID, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -
La última "tentativa" del Gobierno español para reducir la creciente deuda del sector energético reducirá los beneficios de las compañías productoras de energía renovable, a la vez que el Ejecutivo sigue lidiando con un déficit de 28.000 millones de euros engrosado a través de años de subsidios, según publica hoy el 'Financial Times'.
La última reforma del sector aprobada el pasado viernes por el Gobierno forzará a los operadores de energía renovable a elegir entre un precio fijo o el precio de mercado por su energía -y elimina un subsidio previo-, suprime la revisión anual de las retribuciones reguladas del sistema conforme al IPC y establece un nuevo referente de revisión a partir de IPC subyacente (excluidos productos energéticos y alimentación) y a precios constantes.
El rotativo británico indica que los títulos de Acciona, el segundo mayor operador español de energía eólica, se han desplomado un 20%, mientras que los de Abengoa, el mayor fabricante de plantas de energía termosolar, también han caído abruptamente desde que se anunció la reforma.
Los analistas de Mirabaud prevén que el beneficio por acción (BPA) del grupo que preside José Manuel Entrecanales caiga un 40% y que el BPA de Abengoa se recorte un 12%. En Iberdrola, donde las renovables representan una parte pequeña de las ganancias, el impacto supondría una caída del 3%. De su lado, los analistas de Goldman Sachs estiman un impacto del 60% en el BPA de Acciona.
El 'FT' recuerda que durante los vertiginosos años del 'boom' de la construcción en España, un "aluvión" de subsidios gubernamentales e incentivos para las energías eólica y solar hicieron del país uno de los destinos más actractivos del mundo para las inversiones en energía verde, pero las tarifas contribuyeron a un mercado energético "descompensado" y a generar una "montaña" de deuda energética garantizada por el Estado.
Desde que accedió al poder a finales de 2011, el Gobierno español ha intentado luchar contra el denominado déficit de tarifa, que actualmente asciende a unos 28.000 millones de euros, pero se ha topado con la respuesta negativa de los grupos de energía renovable y de inversores que argumentan que las reformas son retroactivas e impactarán en sus beneficios.
Compañías del otro lado del sector han desplegado "de forma agresiva" una labor de 'lobby' con el Gobierno, argumentando tanto las utilities y compañías de renovables que se estaban viendo injustamente afectadas por propuestas esbozadas el pasado año.
El rotativo recuerda que la última ley energética española fue aprobada por decreto por el Gobierno, lo que significa que las compañías afectadas no tendrán oportunidad de apelar contra ella.
Los decretos leyes aprobados de esta forma -el quinto que afecta al sector energético desde que el Gobierno asumió el poder- no pueden ser modificados por el Parlamento español y deben ser aprobados o rechazados por los legisladores. El hecho de que el PP tenga mayoría absoluta hace previsible que el decreto se apruebe, vaticina.
LAS ELÉCTRICAS TRADICIONALES SUFRIRÁN UN MENOR IMPACTO
Aunque se espera que el impacto sobre las compañías energéticas integradas, las cuales operan también plantas eólicas, sea más bajo, las acciones de Iberdrola y Endesa también han caído.
Como consecuencia de la reforma, estos grupos y Gas Natural Fenosa se verán libres de contribuir a los 2.200 millones al déficit de tarifa como resultado de la línea de crédito concedida por el Gobierno a los operadores de renovables para suavizar el impacto de la reforma.