MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
BlackRock, la mayor gestora de fondos del mundo, está reduciendo su exposición a la deuda española, irlandesa y griega por razones de estrategia, a la espera de que la renta fija de estos países periféricos de la zona euro presente mejores oportunidades de inversión.
En un informe sobre la situación y perspectivas de Irlanda, la gestora explica que su estrategia actual consiste en infraponderar la deuda soberana de los tres países por la brecha de precio que presentan respecto al bono alemán.
El giro estratégico de BlackRock respecto a la deuda española, que antes recomendaba comprar a los inversores, se produce después de que el pasado 27 de octubre el Rey Juan Carlos I recibiera en audiencia pública en el Palacio de la Zarzuela al presidente y consejero delegado de Blackrock, Laurence Fink, con el objetivo de recabar información de primera mano de uno de los principales inversores extranjeros en el país.
Según el informe elaborado por el equipo de renta fija de BlackRock, los 'spread' de los bonos de países periféricos, espoleados por los temores de quiebra de miembros de la zona euro, "no son políticamente aceptables" y deberían dar lugar, eventualmente, a oportunidades financieras más atractivas.
La gestora indica que mantendrá una estrecha vigilancia sobre la evolución de la deuda española, irlandesa e italiana en los mercados de renta fija de cara a una mejora de precios tras el agudo deterioro de precios en relación con el 'bund' registrado en las últimas semanas.
Los bonos irlandeses son los que más han sufrido en este periodo, aunque las necesidades de financiación de Irlanda son menores que las que tenía Grecia antes de ser rescatada por la UE, y ha demostrado su voluntad de implementar medidas de consolidación fiscal muy severas, considera la gestora de fondos.
Por otro lado, la firma apunta que los retos fiscales de Irlanda son muy onerosos y podrían crecer aún más ante las debilidades que presenta el sector financiero, muy expuesto al sector inmobiliario, en el que los precios de la vivienda podrían seguir bajando.
LA QUIEBRA DE UN PAÍS DE LA EUROZONA, POCO PROBABLE.
Black Rock precisa que, en su opinión, la probabilidad de que quiebre algún país de la zona euro es "extremandamente baja e improbable" en un horizonte de tres años.
Sin embargo, aboga por que las autoridades de política económica de la zona euro actúen "con prestancia y de forma unida" para prestar apoyo a los países que han de hacer esfuerzos para avanzar en el control del déficit público.
"La zona euro tiene que decidirse entre creer o no creer en su marco de supervisión financiera, voluntad política y Pacto de Estabilidad y Crecimiento", dice el informe de Black Rock.
EL RESCATE, UNA INVERSIÓN RENTABLE.
"Si cree en sí misma, una ayuda de liquidez a los países más débiles no tiene por qué ser una carga para los contribuyentes, sino una inversión rentable. En caso contrario, no puede pretender que el mercado siga comprando sus bonos", argumenta.
BlackRock es uno de los mayores inversores en España con participaciones significativas en el capital de grandes empresas del Ibex, como Santander, Telefónica, Repsol o Iberdrola.
BlackRock se considera una compañía líder en gestión de inversiones, gestión del riesgo y servicios de asesoramiento para clientes institucionales y distribuidores de todo el mundo. A cierre de septiembre de 2010, gestionaba activos por valor de 3.446 millones de dólares (2.495 millones de euros).
La firma ofrece productos que abarcan un amplio espectro de niveles de riesgo para satisfacer las necesidades de los clientes, incluyendo estrategias de gestión activa y pasiva en todos los mercados y tipos de activos.
BlackRock también ofrece servicios de gestión del riesgo, asesoramiento estratégico y sistemas de inversión empresariales a una amplia gama de clientes institucionales a través de BlackRock Solutions.
La firma tiene sede en Nueva York, cuenta con más de 8.900 empleados en 24 países, y tiene presencia en Norteamérica, Latinoamérica, Europa, Asia, Australia, Oriente Medio y África.