Unos 91.000 contribuyentes declaran por encima de este importe, el 0,5% del total, según Gestha
MADRID, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los 91.377 contribuyentes que declaran una renta superior a 150.000 euros anuales en el IRPF (el 0,5% del total) aportan el 15% de toda la recaudación de este impuesto, hasta alcanzar casi los 11.000 millones de euros, según la estadística del IRPF del 2016 recogida por el sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha).
A pesar de no suponer ni el 1% de los 19 millones de declarantes de este impuesto, los contribuyentes más ricos del impuesto contribuyen con el 15% de todos los ingresos del IRPF, hasta los 10.988 millones de euros, frente a la recaudación global de 70.495 millones de euros.
De acuerdo con los planes del Gobierno, estos contribuyentes sufrirán a partir de 2019 un incremento de su tributación en el IRPF si el Ejecutivo logra sacar adelante sus Presupuestos. Hoy mismo la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha confirmado que su departamento negocia con Unidos Podemos elevar el tramo más alto del IRPF a partir de rentas entre 140.000 y 150.000 euros.
La titular de Hacienda, en declaraciones a la Cope recogidas por Europa Press, ha indicado que la idea que maneja el Gobierno es elevar tres o cuatro puntos el tipo máximo del IRPF, situado actualmente en el 48%. De esta forma, los declarantes con rentas superiores a 140.000 o 150.000 euros tendrían un marginal máximo de hasta el 52%, cuatro puntos porcentuales más.
Asimismo, afirmó que como afectaría a un número muy pequeño de contribuyentes, el efecto sobre la recaudación no sería muy significativo. Según Montero, la medida no tiende afán recaudatorio, dado que el 99,5% de los contribuyentes el IRPF quedarán al margen de esta subida.
LOS RICOS NO PAGAN IRPF
Preguntada por si los ricos en España no pagan IRPF, tal y como ayer afirmó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Montero dijo que el jefe del Ejecutivo "expresó una realidad", ya que sólo el 0,5% de los que pagan IRPF están por encima de los 140.000 euros porque los grandes patrimonios usan toda una "ingeniería fiscal" a través de figuras "perfectamente legales", pero que no declaran a través del IRPF, más centrado en las rentas del trabajo que en las del capital.