MADRID 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las enfermedades profesionales provocan cada año la muerte a más de dos millones de personas, seis veces más que los accidentes laborales, según un informe presentado este miércoles por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) con motivo de la celebración, el próximo 28 de abril, del día Internacional de la Seguridad Laboral.
En concreto, de acuerdo con sus estimaciones, cada año mueren 2,34 millones de personas de accidentes o enfermedades relacionados con el trabajo, pero la gran mayoría, alrededor de 2,02 millones de personas, fallecen a causa de una enfermedad profesional.
La OIT denuncia en su informe que la crisis económica y la recesión han llevado a un aumento del estrés, la ansiedad, la depresión y otros trastornos mentales relacionados con el trabajo, provocando incluso, en algunos casos, el suicidio.
De acuerdo con sus cálculos, los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales conllevan una pérdida anual del 4% del PIB en el mundo. En la Unión Europea el coste de las enfermedades relacionadas con el trabajo asciende, como mínimo, a 145.000 millones de euros al año.
"Las enfermedades profesionales siguen siendo las principales causas de las muertes relacionadas con el trabajo, lo que supone una pandemia inaceptable. Esto significa un promedio de más de 5.500 muertes diarias como consecuencia de los distintos tipos de enfermedades profesionales", denuncia la Organización.
La OIT calcula que cada año se producen 160 millones de casos de enfermedades relacionadas con el trabajo, cuya naturaleza está cambiando con "gran rapidez" a causa de las modificaciones tecnológicas y sociales y de las condiciones económicas, que están "agravando" los peligros existentes para la salud y creando nuevos.
TRASTORNOS MUSCULOESQUELÉTICOS, LOS MÁS COMUNES.
Aunque la Organización explicado que algunos de los riesgos tradicionales han disminuido gracias a la mayor seguridad, enfermedades profesionales muy conocidas, como la neumoconiosis, siguen estando muy extendidas, al tiempo que enfermedades profesionales relativamente nuevas, como los trastornos mentales y los trastornos musculoesqueléticos (TME), van en aumento.
De hecho, en el informe se subraya que en los 27 Estados miembros de la UE los trastornos musculoesqueléticos son los problemas de salud relacionados con el trabajo más comunes. Asimismo, el estrés laboral se ha convertido en un grave problema de salud para los trabajadores, hasta el punto de que se vincula este mal con ciertas patologías musculoesqueléticas, cardíacas o digestivas.
Ante este panorama, la OIT reclama un "paradigma de prevención integral" centrado en las enfermedades profesionales, que incida en su reconocimiento, prevención y tratamiento, en la mejora de sus sistemas de registro y notificación, y en la mejora continua de los sistemas nacionales de seguridad y salud.