MADRID 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
El PP, el PSOE y Ciudadanos han rechazado apoyar este miércoles en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso una iniciativa de Unidos Podemos pactada con Esquerra (ERC) que pedía someter a referéndum la aprobación del Acuerdo Económico y Comercial Global con Canadá (CETA) firmado por representantes de la Unión Europea y Canadá este mismo domingo.
La iniciativa, una proposición no de ley presentada por Unidos Podemos a principios de octubre, contemplaba inicialmente solicitar al Gobierno que no autorizase esta firma, rechazar su aplicación provisional y solicitar el pronunciamiento del Tribunal de Justicia de la UE por las posibles incompatibilidades. Una enmienda presentada por Esquerra que ha sido aceptada añadía el referéndum previo a cualquier intento de ratificación del CETA.
PODEMOS AUGURA CAMBIOS DE LEYES "SIN CONTROL DEMOCRÁTICO"
En su debate, el portavoz de Asuntos Exteriores de Unidos Podemos, Pablo Bustunduy, ha rechazado que se trate de un tratado comercial, pues prevé la creación de órganos con capacidades legislativas que, ha dicho, limitará la soberanía nacional, y abre la puerta a cambios legislativos "sin control ni participación democrática".
Bustunduy se refería así a los tribunales de arbitraje a los que, ha explicado, podrán recurrir las multinacionales ante medidas como subidas del salario mínimo o desprivatizaciones por considerarlas "obstáculos innecesarios al comercio".
En este punto, ha calificado a la UE como una "jaula de hierro neoliberal". "Luego se preguntan de dónde sale el euroescepticismo", ha remachado. El diputado de Podemos, además de afear al Gobierno en funciones las negociaciones durante estos meses, ha calificado de "inexplicable" que el PSOE brinde el apoyo al tratado, cuando en parlamentos en los que se encuentran representados han votado en contra.
EL PSOE, CON PREOCUPACIONES PERO SIN OBSTACULIZAR
La respuesta de la socialista Soraya Rodríguez ha sido tajante: "Somos una fuerza internacionalista, no una izquierda localista y nacionalista", ha dicho, instando a defender los derechos de los trabajadores en "un marco jurídico internacional" vinculante para las multinacionales.
A pesar de que no comparten ciertas cuestiones del tratado --como las listas negativas en los sectores privatizables, el régimen de incompatibilidades o la protección de inversiones--, Rodríguez ha defendido el acuerdo ante el desarrollo de Canadá. "Tenemos importantes preocupaciones al respecto, pero queremos trabajar para mejorarlo, no obstaculizarlo", ha dicho.
En este sentido, ha defendido a que gracias al papel jugado por los 'socialistas' europeos, se han excluido de las posibles privatizaciones servicios como la educación o la distribución de agua, y que los tribunales que incluye el CETA no son privados, sino que garantizará, ha dicho, el derecho a regular por parte de todas las administraciones y el nombramiento de los jueces --uno por parte de la UE y otro por Canadá-- en los litigios se hará "de manera clara y transparente".
EL PP CREE QUE AUMENTA LA "SOBERANÍA PERSONAL"
Tanto el Partido Popular como Ciudadanos han sido especialmente críticos con la postura de Podemos, rechazando que haya existido opacidad durante las negociaciones --se puede consultar desde 2014, ha argüído Ciudadanos--, ni que exista un déficit democrático en ellas --su ratificación se aprobará en los parlamentos nacionales, ha recalcado el PP--.
"¿Cuál es la alternativa? ¿El proteccionismo, el aislamiento nacional?", se ha preguntado el 'popular' Guillermo Mariscal, que ha defendido el sector exterior ha sido clave en la recuperación económica y que el tratado con Canadá "merece la pena".
Para este diputado, el tratado no supone una disminución de la soberanía nacional, sino que aumenta "la soberanía de cada persona sobre sus propias acciones". "Dudo que con sus argumentos hubiera estado usted a favor del ingreso a la Unión Europea", ha concluido, dirigiéndose a Bustunduy.
UN TRATADO POSITIVO PARA EL EMPLEO, SEGÚN C'S
Por su parte, Fernando Maura, de Ciudadanos, ha cifrado en 500 millones de euros lo que supondrá la reducción de tasas y aranceles para las empresas españolas cada año, que tendrán acceso a un mercado en Canadá de 30.000 millones, según las estimaciones realizadas por su grupo parlamentario en la Eurocámara.
Maura ha justificado que Canadá "es el país que más se parece a Europa" y ha subrayado que el acuerdo establece el mantenimiento de los derechos laborales, sociales y medioambientales. El tratado, ha dicho, "será positivo para el empleo, la inversión y las empresas", y ha acusado a Podemos de "cerrarse en los estrechos límites de las fronteras".