MADRID 23 Ago. (EUROPA PRESS) -
Tan sólo un 14% de empleados afirma que le gustaría ser jefe o estar en una situación de mando dentro de su empresa, según datos recogidos por Randstad Workmonitor sobre una encuesta realizada a 23.058 personas en 25 países, entre ellos España.
La mitad de los encuestados (52,8%) no tiene en mente la idea de promocionar, lo que pone de manifiesto, según el estudio, la visión que se tiene sobre los directivos de una empresa y las dificultades que han tenido para hacer frente a la crisis económica.
La estabilidad de un puesto de trabajo y unas funciones sencillas, en oposición a las situaciones de estrés y preocupaciones que se derivan de un alto cargo, son los motivos por los cuales los encuestados prefieren mantener su actual empleo.
Otro aspecto que incide en la respuesta es la propia visión que cada empleado tiene de si mismo, y es que aunque la mayoría (66,4%) confía en su faceta persuasiva, reconocen no tener la capacidad de llegar a ser un buen ejecutivo.