MADRID, 27 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno espera ingresar entre 20.000 y 30.000 millones de euros con un "ambicioso" plan de privatizaciones que aprobará antes del verano, según informaron a Europa Press fuentes del Ministerio de Economía y Competitividad.
El nuevo plan del Ejecutivo, que complementa a las reformas ya aprobadas y a otras en perspectiva (unidad de mercado, o ley de emprendedores, entre otras), afectará a todos los ministerios y permitirá la entrada de la iniciativa privada en numerosas sociedades y en la prestación de servicios públicos.
En concreto, el plan afectará a empresas como Renfe, Aena, Puertos del Estado, Paradores y Loterías y Apuestas del Estado (LAE), e incluirá privatizaciones de sociedades y servicios prestados por las comunidades autónomas, como el Canal de Isabell II, de la Comunidad de Madrid.
Asimismo, contempla diversas desinveriones en empresas participadas por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), como IAG (compañía resultante de la fusión de Iberia y British Airways), Ebro Foods o Red Eléctrica de España (REE).
El anterior Gobierno quiso vender las participaciones de SEPI en estas sociedades (2,71% de IAG, 10% de REE y 10,2% de Ebro), pero canceló la operación cuando ya había recibido el visto bueno del Consejo Consultivo de Privatizaciones (CCP) al considerar que no se daban las condiciones de mercado oportunas.
El plan se aprobará antes de verano y permitirá al Gobierno de Mariano Rajoy ingresar hasta 30.000 millones que se destinarán a amortizar deuda y reducir las emisiones del Tesoro Público.
En estos momentos, el Gobierno está estudiando qué activos tienen un valor atractivo para los inversores para evitar ventas a precio de saldo y qué empresas tienen ingresos suficientes para aliviar la tensión de la deuda española.
INTENTO FRUSTRADO
El Gobierno presidido por José Luis Rodríguez Zapatero ya mostró su intención de privatizar parte de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) y de Loterías y Apuestas del Estado (LAE) para reducir las emisiones hasta en 15.000 millones.
En el caso de Aena, el Gobierno aprobó un nuevo marco legal que le habilitaba a crear antes del 28 de febrero de 2012 una nueva sociedad mercantil en la que se diera entrada hasta un 49% al capital privado y quiso abrir la puerta a la gestión privada en régimen concesional de algunos aeropuertos, como el de Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat.
Sin embargo, en el mes de enero, fue el Ejecutivo de Mariano Rajoy el que paralizó los concursos de licitación de los aeropuertos de Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat ante las desfavorables condiciones de los mercados, que podrían deteriorar el valor de los activos del gestor aeroportuario.
El caso de Loterías fue distinto, ya que el Gobierno de Zapatero llegó a autorizar la salida a Bolsa del 30%, lo que habría convertido la operación, que contaba con la oposición frontal del PP, en la mayor privatización de la historia de España.
La salida estaba prevista para el 19 de octubre de 2011, pero antes de que acabara el mes de septiembre el Ejecutivo decidió paralizar la operación porque no se daban las condiciones adecuadas de mercado para garantizar unos ingresos que reflejaran su valor.
EL PP SE OPUSO A LOS PLANES DE SALGADO
Ahora, el Gobierno de Mariano Rajoy ha decidido retomar estas dos operaciones, a pesar de que se opuso firmemente a la privatización del 30% de Loterías argumentando que suponía una malversación de fondos públicos porque provocaría que el Estado dejara de recaudar una cantidad anual fija a cambio de determinados ingresos.
También rechazó la privatización parcial de Aena, aunque avisó de que si ganaba las elecciones generales revisaría las operaciones planteadas por el PSOE para estudiarlas y cambiar parte de sus contenidos y condiciones.