ATA califica de "barbaridad" la huelga general

VALENCIA, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, considera que el borrador de reforma laboral facilitado por el Gobierno a los agentes sociales el pasado viernes es "claramente insuficiente" porque no recoge algunas de las demandas del sector, como la clarificación de las causas del despido.

Sin embargo, afirmó que la convocatoria de huelga general es "una barbaridad" en un contexto en el que España "está siendo continuamente observada desde fuera" y en el que "hay que arrimar el hombro".

Así lo indicó en relación al decreto ley de reforma del mercado laboral que aprobará mañana el Consejo de Ministros y se tramitará en el Congreso como proyecto de Ley. En opinión de Amor, quien hoy ofreció una rueda de prensa en Valencia junto con la Unión de Asociaciones de Autotaxis de la Comunidad Valenciana (UATCV), esta reforma "no es tan drástica como quieren hacer ver los sindicatos", que "con su sobreactuación" han generado un clima general "de alarma" en la sociedad.

"Necesitamos una reforma laboral a la altura de las circunstancias, porque el empleo no lo genera ni el Gobierno, ni los grupos políticos, ni los sindicatos: lo generan los empresarios. Por eso, hay que tener un mercado laboral adaptado a la coyuntura actual", apuntó.

No obstante, el presidente de ATA matizó que el documento entregado a los agentes sociales el pasado viernes es "claramente insuficiente" porque no da respuesta a los 4,6 millones de parados que existen actualmente en el país. "El objetivo de una reforma laboral es quitar el pánico de los empresarios a contratar y acabar, por ejemplo, con la alta tasa de paro juvenil, algo que no ocurre con el actual proyecto", aseveró.

Además, señaló que no contempla tampoco algunas de las reivindicaciones principales de los autónomos, como la clarificación de las causas de despido. Pese a ello, insistió en que la huelga general que convocarán CCOO y UGT "está alejada de las circunstancias que se viven en el país" y dañará "no sólo al Gobierno, sino a toda la sociedad".