ROMA, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Autoridad Bancaria Europea (EBA), Andrea Enria, ha afirmado que la institución podría revisar la exigencia de que las principales entidades europeas tengan un ratio mínimo de capital 'core tier 1' del 9% si funcionan las medidas adoptadas por los Gobiernos europeos para hacer frente a la crisis de la eurozona.
"La necesidad de mantener este tope y su tamaño será examinada de nuevo, siempre y cuando las medidas políticas adoptadas para contrarrestar la crisis de deuda soberana hayan tenido efecto sobre los precios de los bonos soberanos", aseguró Enria en un discurso en Roma.
En sentido, defendió que para detener el círculo vicioso que se ha creado entre le riesgo soberano y la banca es necesario que las medidas adoptadas por la EBA se acompañen de "soluciones políticas eficaces y creíbles" a la crisis de deuda soberana, para evitar el riesgo de contagio a otros países de la zona del euro.
Asimismo, el presidente de la EBA también afirmó que no ha recibido ninguna petición para ampliar más allá del 30 de junio de 2012 la fecha límite establecida por la EBA para que las entidades alcancen este ratio mínimo de capital 'core Tier 1'.
A este respecto, aseguró que sería un error hacer caso a las voces que piden retrasar esa fecha por las dificultades de que los bancos acudan con éxito al mercado privado. "Un escenario en el que se aplace la recapitalización sería, en mi opinión, particularmente negativo", incide.
En este sentido, Enria defendió que en este momentos los bancos necesitan más liquidez y más capital con el fin de asegurar el apoyo de la economía y recalcó que, si el proceso se cancela, no desaparecerían los problemas de la EBA, que surgieron mucho antes de que la EBA anunciará sus exigencias.
Los últimos datos de la EBA publicados en diciembre recogían que los grandes bancos europeos necesitan 114.700 millones de euros de fondos adicionales para alcanzar el ratio de capital de calidad del 9% exigido por la UE para que puedan resistir a la crisis de deuda.
España es el segundo país de la UE con mayores necesidades de recapitalización (26.200 millones de euros), sólo por detrás de Grecia (30.000 millones). Los bancos italianos requieren 15.366 millones de euros; los franceses, 7.324 millones; los portugueses, 6.950 millones; los belgas, 6.313 millones; los austriacos, 3.923 millones; los chipriotas, 3.531 millones; los noruegos 1.520 millones; los eslovenos, 320 millones y los holandeses 159 millones.