Está paralizada desde hace cinco años por falta de suministro
MADRID, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, y su homólogo egipcio, Sameh Shoukry, confían en que se encuentre pronto una solución negociada para la planta de licuefacción de gas de Damietta, propiedad al 40% de Gas Natural Fenosa, que lleva cinco años paralizada por falta de suministro, un contencioso por el que la empresa española y la italiana ENI, copropietaria de la planta, han llevado al Gobierno egipcio ante el CIADI, organismo de arbitraje del Banco Mundial.
Dastis cree que hay motivos para ser "razonablemente optimista" sobre la posibilidad de que "en un plazo breve se pueda subsanar el conflicto" y, en todo caso, ha opinado que una "situación particular" no debe influir "de manera desproporcionada" en otras inversiones.
A su modo de ver, cuando hay relaciones económicas intensas es inevitable que surja algún problema y España como país inversor defiende siempre la seguridad jurídica.
Shoukry, por su parte, ha confiado en una solución negociada, sin que sean necesarias las medidas de arbitraje, y ha atribuido el origen de los problemas a la "alteración política y económica" de hace cinco años. Así, ha asegurado que hay interés por resolver el tema, que está habiendo "desarrollos" y que su Gobierno aprecia las inversiones de la empresa española.
Además, ha apuntado que el descubrimiento de "cantidades muy grandes de gas" en aguas territoriales egipcias augura "un gran beneficio" para las inversiones en este sector. "Vamos a hacer funcionar todas las instalaciones relacionadas con esta inversión", ha añadido.
Sin embargo, no es la primera vez que las autoridades españolas se muestran optimistas sobre las posibilidades de que la planta reanude su actividad. Ya lo hizo el entonces ministro de Industria y Enería, José Manuel Soria, tras una visita a Egipto en 2015, y el antecesor de Dastis, José Manuel García-Margallo, en 2016.
La instalación se encuentra situada en el puerto de Damietta, a 60 kilómetros de la desembocadura del canal de Suez, y dispone de una superficie de 1,2 millones de metros cuadrados. El tren de licuefacción tiene una capacidad de procesamiento anual de aproximadamente 7,6 bcm, de los que Unión Fenosa Gas tiene contratados 4,4 bcm. La planta inició su funcionamiento operativo en diciembre de 2004 tras una inversión total superior a los 1.000 millones de euros.
La planta está controlada al 80% por Segas -firma a su vez participada al 50% por Gas Natural Fenosa y por la italiana ENI-, mientras que el 20% restante está en manos de Egyptian Gas Holding Company (Egas) y Egyptian General Petroleum Corporation (Egpc) a partes iguales.
DETERIORO EN LAS CUENTAS DE GAS NATURAL
Gas Natural Fenosa registró en 2016 un deterioro adicional por valor de 147 millones asociado a su participación en Sagas que respondía, entre otras cuestiones, a la necesidad de poner al día los costes de aprovisionamiento de la sociedad. Estas circunstancias han hecho que el importe provisionado por la 'joint venture' pasara de 1.088 millones a cierre de 2015 a 1.262 millones un año después.
Las provisiones de los años anteriores procedían sobre todo de los incumplimientos por parte del suministrador egipcio a la planta de licuefacción de gas de Damietta, así como de las aportaciones al consolidado de la participación en la joint venture.